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De acuerdo a los denunciantes, Rojas, en su carácter de jefe de Operaciones de la Senad, ordenó un procedimiento en Bella Vista, que fue encabezado por Reinaldo Urizar, jefe de operaciones de la zona, donde resultaron muertos sus acompañantes Blas Núñez Alegre y Silverio Vázquez.
Supuestamente, los agentes los confundieron con traficantes de drogas y rociaron a balazos la camioneta en la que se desplazaban.
Leguizamón y Benítez resultaron procesados por homicidio doloso y dados de baja de las filas policiales. Además, estuvieron 3 años y 6 meses presos, pero fueron absueltos en primera y segunda instancia.
También indican que la fiscala Elva Cáceres realizó diligencias para “encubrir la mala actuación de los agentes de la Senad”.