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El organismo recibió el pedido y habrá que ver si lo estudia. En un juicio oral y público que concluyó el 24 de abril de 2013, Trotte fue condenado a 30 años de cárcel más 10 años de medida de seguridad por el asesinato de Sonia Vera, ocurrido el 3 de julio de 2011.
El Tribunal de Sentencia presidido por Dina Marchuk concluyó que Trotte planificó la muerte de su esposa y madre de sus hijos, a quien ultimó de dos tiros (en el rostro y en la cabeza). En el juicio, testigos revelaron la violencia doméstica que la mujer sufría hacía años.
La condena fue ratificada por la Cámara y en el 2015 la Corte rechazó un recurso de casación presentado por la defensa.
“Nuestro padre, Adolfo Manuel Trotte Haitter, fue condenado de manera injusta, ilegal y arbitrariamente por la justicia paraguaya, quienes pretendieron congraciarse con la sociedad, –con– ciertos sectores de la prensa, supuestos grupos de feministas, sin que los mismos tengan un conocimiento serio, responsable y acabado de los sucesos, que culminaron con el deceso de nuestra madre; (...)”, argumentan Paolo, Sonia Giannina y Camila Trotte Vera.
El menor de los hermanos, Óscar Adolfo, no firma la presentación, radicada con patrocinio del abogado Rodolfo Aseretto.
Específicamente, los recurrentes sostienen que violaron derechos humanos protegidos por la Constitución Nacional Paraguaya, en sus artículos 9º, 16º, 17º inc. 7 y 8, artículos 46º y 47º, referentes a la libertad y la seguridad de las personas, a la defensa en juicio, de los derechos procesales de la igualdad de las personas y de las garantías de la igualdad.
Citan asimismo artículos de la Declaración Americana de los Derechos Humanos (artículos 1º, 2º, 5º, 17º, 25º, 26º, 46º, 47º inc. 1 y 2), Convención Americana de los Derechos Humanos, Pacto de San José (art. 7º inc. 1 y 3, art. 8º inc. f, art. 11º y 24º) y hasta comparan el juicio a Trotte con los que fueron realizados a las personas cercanas al Mariscal López en los tribunales de sangre de San Fernando y con los procesos a judíos en campos de exterminio nazis.
En la presentación, en la que los reclamantes se refieren a su madre como “señora Sonia Vera” o simplemente Sonia Vera, piden la nulidad de la condena y de la medida de seguridad.