Hay 26.000 docentes esperando, pero MEC no puede cubrir 3.000 vacantes

El problema de la falta de docentes en unas 500 instituciones educativas dejando sin clases a más de 40.000 alumnos no son los jubilados, que pueden ser 2.000, 3.000 e incluso 10.000, sino el manejo que le dio el Ministerio de Educación y Ciencias (MEC) a estas jubilaciones y a los nombramientos para cubrir las vacantes.

Así manifestó el abogado Miguel Marecos, presidente del Sindicato Nacional de Directores de Instituciones Educativas del Paraguay (Sinadi).

Marecos explicó que el MEC ya cuenta con un “Banco de Elegibles” o banco de datos con más de 26.000 docentes registrados, listos para ocupar incluso la misma cantidad de vacantes.

Ese banco de datos está conformado por docentes que ya pasaron por un concurso y obviamente para ser “elegibles” tuvieron que reunir las condiciones de idoneidad y aprobar los exámenes hasta de tres etapas.

De esta forma, los procesos para cubrir los cargos vacantes no deberían haber sido demasiados complicados ni traumáticos. Se buscaba dentro del banco de datos a los docentes para el perfil vacante y se los nombraba directamente, un proceso que bien podría concretarse en cuestión de días.

Si no se encontraban maestros disponibles en la zona de vacancia, se buscaba de otras zonas, pero siempre dentro del mismo banco de datos.

Sólo si no se lograba ubicar a algún docente disponible para cubrir la vacancia dentro del banco de datos se debía recurrir al concurso para contratar a los interinos, pero como último recurso. 

Sin embargo, el ministerio optó por el proceso más largo y burocrático, el de contratar interinos y volver a concursar para las vacantes.

Descontento generalizado

Cada vez van sumando las quejas de profesores, especialmente del interior, en medio de un descontento generalizado por la forma en que el MEC lleva adelante la contratación de los docentes para cubrir las jubilaciones.

Según los maestros, existe el rumor de que el ministro Eduardo Petta estaría recurriendo a la figura de los interinos para meter gente de afuera que luego serían confirmados. Es decir, el problema de la falta de docentes tendría un trasfondo político antes que administrativo, señalaron las fuentes.