La pareja contó que a inicios de marzo vinieron para que Florencia sea sometida a una operación de una hernia abdominal, pero en eso se decretó la emergencia sanitaria y todas las cirugías que no eran de urgencia quedaron suspendidas. Pero el principal drama que debieron afrontar fue que ya no pudieron viajar al interior y se quedaron varados en la Capital.
Sin parientes, ni conocidos en Asunción la pareja primero vio la posibilidad de ir a su casa, pero ya regía el aislamiento sanitario y deambularon por Asunción hasta que decidieron instalar una carpa en el paseo central de la avenida Carlos Antonio López, para pasar los días. Inicialmente creían que se iban a quedar pocos días hasta que se pueda dar la operación y luego emprender el regreso a su hogar. Abandonados a su suerte, Francisco comentó ayer que el Gobierno los tiene olvidados en plena vía pública. Doña Florencia, para agravar su situación, se moviliza con muletas ya que le amputaron una pierna, pero ambos confían en que saldrán adelante.
Francisco dijo que “lo que nosotros queremos es que ella (Florencia) se opere, necesitamos de una malla (malla quirúrgica) para que ella pueda caminar sin problemas y volver a nuestra casa”.
