“No hay que apresurarse, pero hay que empezar a hablar”, dijo agregando que las primeras pruebas de factibilidad de una eventual alianza se darán en las acciones principalmente en la Cámara Alta, donde el PLRA y Frente Guasu son segunda y tercera fuerza política, respectivamente.
Según considera, fue mayor la pérdida del PLRA en materia política, que la electoral, ya que si bien mantuvo buena cantidad de cargos electivos, perdió autoridad política.
“El problema no es que el PLRA perdió estas elecciones, sino que está demostrado, y no va a cambiar eso en el 2018, que una sola fuerza política no puede derrotar al Partido Colorado”, indicó.
Agregó que la pérdida política liberal se remite también a que “la dirigencia del PLRA perdió autoridad moral para convocar a otras fuerzas para una alianza en este periodo de cara al 2018. Esa es la derrota política de Blas Llano y los liberales”, agregó.
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Consideró además que “tanto la ANR como el PLRA no tienen un proyecto nacional. Ambos son grandes aparatos electorales y ganan elecciones”, pero para vencer a los colorados no basta el aparato sino que se tendrá que discutir un “proyecto nacional”.
Indicó que la discusión de una nueva propuesta en conjunto, debe darse mediante un debate donde “hay que discutir el gran proyecto nacional y la alianza al 2018” en forma paralela.
Indicó, por su parte, que la izquierda deberá trabajar en fortalecer su estructura nacional, algo que según dijo, ya está en proceso en el Frente Guasu.
