Gavilán presentó una protesta ante Contrataciones Públicas en la que señala puntos específicos que a su criterio revelan que el pliego de bases y condiciones para la adquisición de leche en polvo enriquecida para el INAN, por un lado, limita la participación de oferentes y, por el otro, condiciona a que una sola empresa sea la adjudicada, que en este caso sería la firma Chacomer, cuyo presidente es Ronald Walde.
Este producto lácteo será utilizado en el Programa Alimentario Nutricional Integral (PANI) del Ministerio de Salud Pública y Bienestar Social a través del INAN, dirigido a niños menores de 5 años y mujeres embarazadas o lactantes.
En la denuncia se lee que en el pliego, en el punto relacionado a la experiencia y capacidad técnica, se especifica que el oferente deberá demostrar experiencia en distribución y venta de productos similares en los últimos 5 años. “Este pedido está absolutamente direccionado a la única empresa que en los últimos 5 años viene siendo adjudicada por el INAN en las licitaciones de compra de leche, pues tratándose de un producto sumamente simple, LECHE EN POLVO CON PREMIX FORTIFICANTE, cualquier empresa que posea una “mezcladora” puede elaborarlo. Entendemos que se requiera experiencia, pero también una empresa que procese alimentos secos tiene la suficiente experiencia para elaborar este producto. Creemos que se trata de una exigencia exclusivamente dirigida para que la misma empresa siga ganando estas licitaciones, porque con esto se impide la participación de empresas que tengan la maquinaria y la estructura necesarias”, dice Gavilán.
La representante de la firma Arcángel SA, firma con experiencia en la provisión de alimentos para la merienda escolar en diferentes departamentos del país, afirma que la única institución pública que compra leche en polvo es el INAN. “Tampoco hay empresas privadas que compren leche en polvo enriquecida, por lo que es absolutamente imposible para nosotros adquirir los cinco años de experiencia que requieren, y se demuestra que se está impidiendo que otra empresa pueda ofertar”, indicó.
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El otro punto esencial que cuestionan es el relacionado a la capacidad de distribución, ya que solicitan que el oferente cuente con un parque automotor propio para la distribución del producto. “Esta exigencia es todavía más infundada e injusta. Es absolutamente innecesario poseer vehículos propios para garantizar una buena distribución en los tiempos del leasing y en los tiempos de la tercerización.
Carece de importancia que los vehículos sean propios o alquilados o se contrate una empresa de logística. La tendencia en el mundo es tercerizar los servicios para optimizar los resultados, así que con este requerimiento solo están demostrando su interés en limitar la participación y lograr que la empresa amiga gane de nuevo esta licitación”, afirmó la representante de Arcángel SA.
Antecedentes
En octubre del año pasado también saltó la denuncia de que la licitación para la compra de leche por parte del INAN estaba dirigida. En ese entonces, el mismo titular de Contrataciones, Douglas Oneto, había señalado que el pliego apuntaba directamente a una empresa, que es la misma que proveyó durante dos años en forma exclusiva leche en polvo al INAN.
Esta situación había generado incluso la salida de la exdirectora del INAN Laura Mendoza, y fue reemplazada por diposición del ministro de Salud, Antonio Arbo, por Rafael Figueredo, quien se había comprometido a transparentar todos los procesos licitatorios para la adquisición de leche en polvo.
Sin embargo, ahora nuevamente surge el manto de dudas sobre la compra que debe concretar la institución para la próxima semana por unos US$ 7,5 millones.