El sueldo de Javier era de G. 3,5 millones en el 2011, la cifra subió a G. 7,5 millones en 2013 hasta alcanzar G. 13,5 millones en el 2016, luego de que el Gobierno del Nuevo Rumbo lo ascendiera de subadministrador al cargo de administrador. Magistralmente, el jefe tiene una casa valuada en US$ 250.000 y hace poco terminó otra de USD 200.000.
Su esposa, Cynthia Lorena Agüero Colmán, a quien tenemos registrada en fotografías realizadas durante nuestra visita, salió a atendernos y negó que la casa sea de Javier. La mujer se hizo pasar por “Carla Colmán”, inventando así una identidad que coincide con su segundo apellido.
Entre el 2013 y el 2016 Javier compró un automóvil BMW que costaba en esa época unos US$ 11.000 y en el 2015 compró una camioneta Toyota Fortuner del año de US$ 50.000.
Su esposa Cynthia, quien en su último empleo figura como auxiliar contable en un centro comercial, tiene a su nombre una camioneta Isuzu modelo 2016 que cuesta unos US$ 40.000 pero, sin embargo, ella no tiene un salario mensual formal.
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Consultado sobre los bienes acumulados, Javier se negó a hablar por teléfono y por WhatsApp señaló: “Las declaraciones de bienes de funcionarios públicos los hacemos ante la Contraloría”. Agregó que “a consecuencia de los artículos periodísticos mis hijas ni van al colegio, además una de ellas tiene un problema de salud”.
Sugirió a nuestra periodista de investigación que también busque noticias positivas “para que el país pueda fortalecerse”.