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Al abrir la puerta se encuentran el estar, el comedor y la cocina, con una gran abertura que los conecta con el balcón. Desde la altura, el verdor de los árboles del entorno se muestra encantador. La cocina, amoblada con alacenas altas y bajas, está equipada con electrodomésticos sobre mesadas de granito.
Los dormitorios –uno de ellos, en suite– poseen ropa de cama de algodón, sábanas y fundas de tejidos muy fáciles de lavar y mantener impecables. Las habitaciones están acústicamente aisladas entre linderos, lo que le agrega un plus más que interesante a este tipo de viviendas y hace que el descanso sea efectivo. Las ventanas poseen carpintería en PVC color blanco con vidrios templados de 10 mm de espesor y los dormitorios cuentan con modernos placares de Bertoni.
La deco contiene mobiliario muy novedoso en tonos prácticos, que incluyen el marrón, gris, negro, blanco y un toque de rojo. El comedor cuenta con una mesa de madera natural, modelo gueridon, con patas de cabo de acero, de 155 x 90 x 75 cm, con seis lugares y acompañan unas sillas negras que hacen el contraste.
El estar, por su parte, tiene un sofá de dos cuerpos color gris, modelo groove; una mesa de centro eames y el rack para el plasma complementan el lugar.
Los pisos son de porcelanato de 60 x 60 cm, y los muros, de material cocido, explica el realizador de Habitalis, el arquitecto Víctor González Acosta, quien detalla que los cuartos de baño cuentan con pisos de porcelanato antideslizante de 45 x 45 cm, mesada de granito, mamparas, amplios espejos, griferías y artefactos. La iluminación es led y en los ventanales se observan las cortinas roller que protegen los interiores. Los sectores están debidamente demarcados y el pasillo conecta con el área íntima, articulando los accesos. La luminosidad y la aireación no son detalles menores, ya que en las alturas es muy importante también la economía, por lo que en momentos necesarios, desde luego, todas las áreas disponen de la posibilidad de climatización.
En el exterior, un patio alberga un minijardín con un parque infantil, bien delimitado con un muro de piedras laja. También hay un gran salón para reuniones sociales en planta baja.
La opción para la gente joven es quedarse en un barrio cercano a sus lugares de trabajo, y la inversión en un departamento sigue siendo muy interesante para la primera vivienda. Hay un ahorro interesante de tiempo y, en muchos casos, se evita el estrés del tránsito. Luego es factible equipar un espacio reducido con pocos elementos decorativos. Todas estas son positivas oportunidades que empujan a los matrimonios recién formados a optar por esta modalidad.
La flexibilidad de vivir en un departamento a cualquier edad es un sueño posible y una magnífica sensación de libertad.
La tecnología, que es un eje principal en un departamento como este, incluye un sistema de control de circuito cerrado de televisión, monitoreo de áreas comunes desde la portería, sistema de protección contra incendios con detectores y rociadores, escaleras presurizadas, generador de emergencia para los ascensores, servicios básicos, iluminación en áreas comunes, entre otros factores que no se ven, pero son trascendentales.
mirtha@abc.com.py