En el 2018, la violencia irracional, la brutalidad y la saña afloraron en forma de crímenes que conmocionaron a la sociedad paraguaya. Y la atrocidad no fue exclusiva del crimen organizado, a veces estuvo donde menos debería: dentro de la propia casa.
La presidencia de Donald Trump, el Brexit y el avance de radicales en Alemania y Francia son algunas muestras de la ola populista que estalló en 2016 y se robusteció en 2018. América no fue la excepción. En Europa proliferan los movimientos de derecha.
Olimpia fue el mejor del 2018 en el campeonato local. Consiguió el título de campeón en el Apertura y luego repitió en el Clausura, estuvo muy cerca de lograr la triple corona pero no pudo con Guaraní en la final de la Copa Paraguay.
El 2018 fue el año en que se disputó el vigésimo primer mundial, fue en Rusia nuevamente sin participación de Paraguay. Francia se consagró como el mejor por segunda vez en su historia.
Los acuerdos pegados con saliva y las sonrisas falsas de los albores del 2018 fueron hechos a un lado. Afloró en su lugar una grieta profunda que divide a la Asociación Nacional Republicana en una guerra intestina cuyo final no es fácil presagiar.
A lo largo del año, inundaciones, tormentas y vientos de más de 120 km/h afectaron al Paraguay, que ocupa el puesto 8 entre los más vulnerables de América Latina y el Caribe. Según expertos, los eventos extremos son atribuibles al cambio climático.