La diabetes y la hipertensión arterial son enemigas mortales de Paraguay. Casi el 10% de la población padece de diabetes y poco más del 17% tiene probabilidades de sufrirla, según datos publicados por el Ministerio de Salud Pública y Bienestar Social a principios de 2014.
“La diabetes es un trastorno en el metabolismo de los hidratos de carbono, es decir, es el aumento de niveles de azúcar en la sangre”, explicó la Dra. Rosa Vega, endocrinóloga. Todo este aumento se produce debido a que la insulina –hormona secretada por el páncreas– no funciona de manera correcta, causando que el azúcar no pueda ingresar a las células de nuestro cuerpo para ser almacenada como energía.
Esa alteración es también denominada hiperglucemia y puede ocasionar daños a varios órganos del cuerpo como los ojos, riñones, vasos sanguíneos y nervios.
La respuesta a esta pregunta es sí: “Todo azúcar por encima de un nivel”, refirió la endocrinóloga. Para determinar ese nivel se lleva a cabo un estudio de la sangre llamado glucemia, en que si el número es mayor a 100 significa que hay un caso de prediabetes, y si el resultado arrojado es mayor a 126 de glucemia es diabetes.
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Existen cuatro grupos de diabetes que se presentan en la población:
- En primer lugar, la diabetes Tipo 1, que se presenta en niños, adolescentes y jóvenes.
- En segundo lugar, la diabetes Tipo 2. El 80% de los pacientes pertenece a esta variante. Por lo general se da en adultos, aunque actualmente se están encontrando casos en niños y jóvenes.
- La diabetes gestacional ocupa el tercer puesto y se presenta durante el embarazo. Así también, está la diabetes secundaria causada por el tratamiento de otra enfermedad en que se utilizan glucocorticoides, lo que puede aumentar el azúcar en la sangre.
Otras enfermedades endócrinas -hormonales- también pueden derivar en diabetes.
Existen factores de riesgo en cada persona que pueden incidir en que la misma desarrolle diabetes, entre ellos la especialista Dra. Rosa Vega citó:
- Antecedente familiar: “Que tengas papá o mamá, o ambos, con diabetes o hermanos con diabetes, entonces eso hace que tengas una predisposición a ser diabético”.
- Obesidad o el sobrepeso causado por la mala alimentación de la persona.
- El sedentarismo: “A pesar de todas las campañas que hacemos de que hay que hacer actividad física, todavía el casi 75% a 80% de la población es sedentaria”.
Estos son los puntos más importantes, pero también el hecho de que una mujer haya tenido diabetes gestacional propicia las condiciones para que luego de cinco a diez años del embarazo desarrolle diabetes, según la explicación brindada por la doctora.
La sintomatología de la diabetes incluye sed exagerada o polidipsia; orina frecuente, también se le denomina “poliuria”, que ocurre por lo general durante la noche; pérdida de peso; picazón en zonas genitales y tardanza en cicatrización de heridas.
Hay que resaltar que la diabetes también aparece de forma asintomática.
“Muchos pacientes en la primera consulta ya tienen complicaciones, vienen con sensación de hormigueo en los pies o sensación de quemaduras o dolor, eso ya se llama neuropatía diabética”, mencionó la endocrinóloga Vega. Otras razones como infecciones urinarias, disfunción eréctil o bien una retinopatía (daño en la visión que puede terminar en ceguera) empujan a los pacientes a consultar, ya con cierto grado de la enfermedad.
La diabetes puede traer “complicaciones macrovasculares, daño a los grandes vasos (infarto al miocardio, cerebro o extremidades) y microvasculares, los pequeños (retina y riñones)”, ejemplificó. El aumento del azúcar en la sangre causa todos estos daños y más en los vasos sanguíneos y nervios que cubren las arterias del cuerpo. Además, es una de las principales causantes de amputaciones.
“La diabetes no viene sola. ¿Qué quiere decir? Que a veces el paciente consulta por su azúcar, pero nosotros tenemos que hacer un chequeo completo de lípidos (grasas), el colesterol y triglicéridos”, refirió la endocrinóloga acerca del control. Sobre el tratamiento, la doctora Rosa Vega hizo hincapié en que la educación debe estar en primer lugar, “porque el paciente educado, el paciente diabético que conoce su enfermedad tiene cuatro a seis veces menos probabilidades de tener complicaciones”.
El segundo tópico es el diseño de un plan alimenticio, eliminando las comidas "chatarra", grasas y demás que puedan dañar o agravar la situación. Tercero, la actividad física y buscar alternativas para realizarlas, comer frutas e hidratarse adecuadamente. Otros puntos lo conforman la automedicación oral o la inyección de insulina y el automonitoreo, en que el paciente debe controlarse midiéndose su azúcar en la comodidad de su hogar y con un glucómetro, artefacto que hoy por hoy es bastante accesible.
Actualmente existe un club de pacientes diabéticos que dirige la Dra. Rosa Vega. Este tuvo su inicio hace aproximadamente siete años en la Clínica Periférica de Ingavi, perteneciente al Instituto de Previsión Social, con charlas educativas sobre la diabetes. “Les gustó, les encantó realmente. Yo veía la participación, el interés por parte de ellos, hasta que llegó un momento en que ya no entrábamos en los pasillos, entonces tuve que ver un laboratorio cercano, que es Laboratorios Lasca, a quienes agradezco”, relató la diabetóloga Rosa Vargas.
Así, todos los años se desarrolla en un salón del mencionado laboratorio el curso educativo para pacientes con diabetes. Se inicia en el mes de abril y la clausura tiene lugar específicamente el 14 de noviembre: Día Mundial de la Diabetes. El día final del taller, la gran mayoría de los pacientes, que son más de 140, "van vestidos de azul; en el cierre realizan actividades culturales varias y también se les otorga un certificado por la participación", reñató.
El símbolo de la diabetes es un círculo de color azul “que, por un lado, simboliza el color del cielo y la unión de toda la comunidad diabética mundial”, graficó Vargas. Otro ícono es la mano arriba indicando “stop diabetes”, que es el lema de la Organización Americana de Diabetes, y con esto lo que se busca es, “por lo menos, si ya no podemos disminuir la cantidad de los que estamos actualmente, hacer un stop, hacer educación, un buen plan alimentario”, argumentó la especialista.