“En sólo dos días, dos barcos cargueros civiles en Odesa han sido dañados por misiles balísticos rusos”, escribió Sibiga en su cuenta de X y reveló que una persona murió y otras cinco resultaron heridas en el segundo de los incidentes.
El carguero dañado el lunes transportaba maíz y tenía como destino Italia.
En el ataque del martes, agregó Sibiga, una persona murió y otras cinco resultaron heridas, según el ministro, que calificó estas acciones de “táctica terrorista deliberada” por parte de Rusia.
Por su parte, el jefe de la Administración Militar de Odesa, Oleg Kiper, ha informado de que el fallecido es un trabajador portuario ucraniano de 60 años. Los cinco heridos son, según Kiper, trabajadores extranjeros.
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El barco atacado el lunes navegaba bajo la bandera de las islas de San Cristóbal y Nieves, y el que sufrió daños en el ataque letal ruso del martes bajo la de Palau.
Según Kiper, Rusia buscaba alcanzar infraestructuras portuarias de la región de Odesa, en el sur de Ucrania y ribereña del mar Negro, con estos ataques.
“Al atacar barcos civiles, Rusia intenta debilitar la economía ucraniana y amenaza a millones de personas en todo el mundo con el hambre”, escribió en su mensaje el ministro de Exteriores, que pidió a la comunidad internacional “unir fuerzas” para “garantizar la libertad de navegación en el mar Negro y la seguridad alimentaria global”.