“Estamos perdiendo la carrera” frente al cambio climático por la falta de “voluntad política”, dijo el secretario general de la ONU, Antonio Guterres, en una entrevista difundida por Facebook coincidiendo con el Foro Económico Mundial (WEF).
“La evolución es peor de lo previsto” por lo que “es absolutamente indispensable invertir la tendencia”, dijo en un mensaje a los 3.000 responsables políticos y económicos reunidos esta semana en la exclusiva estación de esquí suiza.
En ausencia de grandes líderes como Donald Trump, Emmanuel Macron o Xi Jinping, estrellas del año pasado, el foro ha tenido menos contenido político esta vez, con la presencia de científicos como la primatóloga Jane Goodall, el ex vicepresidente estadounidense Al Gore, conocido por su lucha contra el cambio climático, o el naturalista David Attenborough.
“Nos dirigimos hacia un aumento de les temperaturas de 4 grados centígrados en este siglo y la indiferencia pasiva con la que la mayoría de países lo aceptan parece un pacto suicida”, dijo el exsecretario de Estado norteamericano John Kerry en una entrevista a CNBC.
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El acuerdo climático de París de 2015, debilitado por la retirada de Estados Unidos y la posibilidad de que también lo haga Brasil, tiene el objetivo de limitar al 2% el aumento de las temperaturas en relación a los niveles preindustriales. Pero según Guterres “es insuficiente”.
“Los países tiene que asumir compromisos más ambiciosos” , dijo el responsable de la ONU, que lamentó la “ausencia de voluntad política”.
Tras su intervención, la directora ejecutiva de Greenpeace, dijo que es necesario actuar.
“La cuestión es si las compañías y los países estarán a la altura del desafío y empezarán a trabajara para resolver uno de los mayores riesgos para la economía global y para el planeta en su conjunto”, dijo en una declaración a la AFP.
La cuestión está en todos los debates, sobre todo el impacto económico del cambio climático, que es la principal preocupación de los participantes, según una encuesta publicada la semana pasada.
En los pasillos del centro de congresos del foro varios empresarios dicen ser conscientes de la urgencia del problema y aseguran estar dispuestos a cambiar.
“No nos interesamos por las energías renovables para ser ecologistas. Nos interesamos en ellas porque son la mejor manera de entrar en el mercado de la electricidad”, un mercado de futuro, dijo el presidente de Total, Patrick Pouyanné, en una entrevista en CNBC.
Greta Thunberg, una adolescente sueca de 16 años, vino a Davos en su cruzada contra el cambio climático con la esperanza de hacer reaccionar a la élite política y económica mundial.
Desde el mes de agosto la adolescente lanzó una “huelga de escuela por el clima” que le lleva a manifestarse todos los viernes frente al Parlamento sueco.
“Tienen que hacer algo, enfadarse y transformar ese enfado en acción”, reclama Thunberg, que ha decidido no usar nunca más el avión, demasiado contaminante, y por eso tardó 32 horas para venir desde Estocolmo a Davos.
Una actitud que contrasta con los helicópteros y los jets privados que usan muchos de los participantes para llegar hasta la estación de esquí suiza.
La situación en Venezuela, donde el miércoles el jefe del Parlamento opositor Juan Guaidó se autoproclamó presidente interino del país, fue objeto de varios encuentros informales.
El presidente del gobierno español, Pedro Sánchez, se entrevistó este jueves en Davos con los presidentes de Colombia, Ecuador y Costa Rica para exponerles la posición europea sobre la cuestión.
Luego habló por teléfono con Guaidó “a iniciativa suya”, según el gobierno español, y le trasladó “su reconocimiento por el coraje con el que está comportándose en esta situación”.
España decidió de momento no reconocer a Guaidó como presidente a la espera de buscar una posición común con sus socios de la Unión Europea.