El titular del IPS dijo a ABC Color que antes de iniciar las obras se solicitaron todas las condiciones medioambientales y la legislación para construcciones de esta naturaleza, pero que con la paralización de las obras del metrobús y las obras complementarias, el proyecto de alcantarillado y la planta de tratamiento también quedaron suspendidos.

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Actualmente, el MOPC acaba de iniciar las obras para dicha planta; sin embargo, Rodríguez afirmó que “los plazos nos complican a nosotros porque queremos lanzar en octubre/noviembre, pero las obras no comienzan”. Aseguró que la clínica tiene una planta de tratamiento y el agua que expulse al desagüe que conecta al arroyo San Lorenzo “será tratada”.

Sostuvo que en estos momentos el hospital no producirá desechos líquidos hospitalarios, ya que empezará con consultorios y pequeñas urgencias. “Para octubre llegaría el servicio de traumatología, en donde sí tendremos otros desechos”, acotó.

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En principio, la clínica estaba proyectada para 250 camas, pero se tomó la determinación, en 2017, de ampliar a 600 camas, con lo que la construcción tiene un costo total de US$ 75 millones.

Con respecto a la planta de tratamiento que debía construirse en la zona, expuso que “ya se está haciendo la excavación para esta solución definitiva. La planta de tratamiento del MOPC no es solo para el hospital, es para toda la toma. Va a llevar su tiempo”.

Defendió a la empresa constructora, ya que la planta en cuestión estaba a cargo del MOPC, pero dijo que se podría considerar la responsabilidad del IPS por no prever con la cartera de Obras Públicas un escenario como este.