Escoto conversó este miércoles con ABC para pedir a la población que reanude los esquemas de vacunación, una rutina que se dejó de lado por la pandemia del coronavirus. Así se evita la expansión de otras enfermedades inclusive más letales que el COVID-19.
“Lamentablemente, uno de los impactos colaterales de la pandemia fue la suspensión o disminución de los servicios esenciales (…) Eso tuvo un impacto fuerte en la vacunación, se redujo significativamente y puso a la población infantil en riesgo”, recordó Escoto.
El médico habló, por ejemplo, de casos de sarampión y difteria en la región, enfermedades contenidas en Paraguay. “Hacemos un llamado a la población a que vaya a los servicios de salud para que reciba la vacuna de forma segura para que proteja a la población infantil, esencialmente para evitar alguna ola de estas enfermedades que están ahora controladas”, añadió.
Vacuna contra COVID, prioridad
Si bien todavía no se aprobó una vacuna contra el coronavirus, Escoto indicó que Paraguay es uno de los siete países de la región que tienen prioridad para la recepción porque adelantó dinero para cubrir a al menos el 30% de la población. “Paraguay fue uno de los primeros países que se sumaron a esta iniciativa regional. También aportó los recursos para que el 30% de la población pueda acceder”, sostuvo.
Todos los beneficios, en un solo lugar Descubrí donde te conviene comprar hoy
Lea más: Paraguay quiere vacuna para 1.500.000 personas
“Tenemos 156 vacunas que están en la fase de laboratorio. 25 vacunas que están en la fase 1, que se prueba en pequeños grupos de humanos. Hay 19 vacunas que están en fase 2, en grupos limitados pero controlados y 10 vacunas en fase 3 que se prueba en población adolescente, mayores. Es difícil poder anticipar cuál sería la primera, pero estamos con muchas esperanzas”, detalló, agregando que alguna estaría lista para finales de este año o inicios de 2021.
Actividades virtuales para Caacupé
“Creemos que es un riesgo que puede evitarse (la visita de las personas a Caacupé). La recomendación es que se trate de que sea virtual esa actividad, que cada comunidad pueda vivir en su propia comunidad, sin salir de su espacio y no exponerse”, dijo el Dr. Escoto sobre la convocatoria para las celebraciones de Caacupé, que en teoría tienen un protocolo especial del MSP.
Escoto consideró que naturalmente será difícil controlar a todos los peregrinos e insistió en que las personas que van en masa a un sitio así son consideradas “amplificadores de la epidemia”.
Lea más: OPS expresa su preocupación por festividades de Caacupé
“Cada iglesia, cada diócesis pueda vivir su fe sin salir de este espacio y proteger a las personas mayores de 60 años, con enfermedades de base. Estamos todavía en una meseta bastante alta, que implica una circulación comunitaria alta”, concluyó Escoto.
