El 21 de agosto del 2019, Andrés Armoa había llegado al hospital de Calle’í, San Lorenzo, pidiendo asistencia para su esposa María Contrera Valiente, quien estaba herida de bala, asegurando a la vez que la mujer fue herida por motochorros. Sin embargo, luego de brindar declaraciones a la Policía y varias contradicciones, había confesado que él disparó contra la mujer, alegando que fue “accidental”.
Por el caso, el juicio oral y público inició el pasado 24 de mayo y culminó hoy, con la culpabilidad de Armoa por feminicidio y producción de riesgos comunes, recibiendo así una condena de 29 años de prisión, conseguido esto por la fiscal Laura Guillén.
El Tribunal de Sentencia que dio la condena estuvo conformado por los jueces Rilsy Ortiz, Victoria Ortiz y Pedro Nasser.
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Con esto se demostró que el hombre asesinó de un disparo a su concubina, madre de sus dos hijos, el 21 de agosto de 2019 a las 14:30 y después de una hora de haberla ejecutado, la trasladó a San Lorenzo y no al hospital de Ñemby que estaba a minutos de la residencia, llegando la mujer así hasta Calle’í sin signos de vida.
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Según el testimonio de la forense María Tottil, se probó que la víctima fatal se encontraba sentada o arrodillada al momento de ser ejecutada igualmente con el informe y el testimonio de la subcomisario Patricia Piris, se comprobó la existencia de nitrito y nitrato en la herida de la víctima, lo que prueba que el arma se encontraba máximo a 70 cm de la mujer al momento del disparo.
También mediante la declaración de familiares y vecinos, se confirmó que la fallecida era frecuentemente víctima de violencia física y psicológica por parte del acusado quien constantemente realizaba amenazas de muerte a la víctima, ya intimidándola con un arma de fuego.
En la casa fueron encontradas tres armas de fuego, una calibre 22, que estaba escondida en el techo y fue la utilizada para concretar el hecho.
Las otras armas encontradas son dos escopetas y varias municiones, según detallaron durante el juicio y que terminó con la condena mencionada, tras comprobarse que Armoa mató de un disparo a su concubina, según informó Higinio Ruiz Díaz, corresponsal en la zona.
“En casi tres años se logró condenar a Andrés Armoa por la comisión del hecho punible de feminicidio y producción de riesgos comunes, la condena es de 29 años y el mismo se encuentra recluido en la cárcel de Tacumbú”, expresó la fiscala Guillén.