Nenecho pide plata hasta para “denuncias ciudadanas” en Asunción

La administración de Óscar “Nenecho” Rodríguez obliga a los contribuyentes asuncenos a ir presencialmente para realizar cualquier tipo de reclamo vecinal, previo “pago” en ventanilla. Quedaron atrás las llamadas telefónicas gratuitas de denuncias ciudadanas

Denuncia ciudadana en la Comuna de Asunción.
Para que la comuna reciba una queja vecinal, el asunceno debe ir al Bloque A, comprar estampillas y presentar su queja por escrito.

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Los tiempos de llamar telefónicamente a la comuna capitalina para denunciar un bache, baldío o un vertedero ilegal quedaron atrás. Ahora la intendencia pide que la denuncia sea “presencial”, plata y darle el seguimiento por cuenta propia.

Esto debido a que desde hace un tiempo la administración del cartista Óscar “Nenecho” Rodríguez exige formalizar cualquier denuncia vecinal yendo hasta la comuna, llenar una solicitud con el número de cuenta catastral, fotocopias de cédula, “estampillas” por más de G. 20.000 y una hoja con membrete impreso que dice “Municipalidad de Asunción G. 300 Trescientos Guaraníes”.

Cualquier contribuyente puede verificar esta situación si toma su celular o su teléfono fijo y llama a la comuna, en el horario del funcionariado público, desde luego.

Las telefonistas de la intendencia le dirán que debe “apersonarse” al edificio municipal, en el “Bloque A”, para presentar una solicitud por escrito.

Al llegar al “Bloque A”, el contribuyente debe llegar hasta el segundo piso donde las funcionarias de “Mesa de Entrada” le exigirán rellenar un formulario de “Solicitudes Varias” y volver a la planta baja para comprar “estampillas”. Sin dicho pago y la adhesión de estas estampillas, la denuncia no es recepcionada.

Si el contribuyente desconoce su número de cuenta catastral, deberá volver más tarde u otro día. Lo mismo si no trajo el dinero suficiente para comprar todo lo requerido. Todo esto cubriendo el costo del pasaje en transporte público o combustible.

Seguimiento, a tu cuenta

De esta manera una simple queja vecinal se convierte en un “dosier”. Cuando es completado se presenta ante la Comuna donde la funcionaria a cargo debe entregarte una contraseña impresa con todos los datos.

Sin embargo, todo esto ha sido en vano ya que la propia empleada municipal le dirá con resignación que la denuncia presentada será enviada al “séptimo piso” y desde ese punto cada uno debe hacerle “el seguimiento”, es decir llamar insistentemente para que los inspectores municipales hagan su trabajo.

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