Monseñor Cuquejo: sepelio será esta tarde en la Catedral Metropolitana de Asunción

Tres misas se celebraron ayer en la Catedral Metropolitana de Asunción, en nombre de Monseñor Eustaquio Pastor Cuquejo Verga, Arzobispo Metropolitano emérito de la Arquidiócesis de la Santísima Asunción. Él falleció ayer, con 83 años, luego de padecer largamente un estado de salud delicado.

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El padre Reinaldo Roa Servín, Rector de la Catedral Metropolitana, indicó que es un momento de mucho dolor y tristeza. “Saber de que un gran obispo que ha tenido la Iglesia hoy parte a la casa del Padre es triste, pero también es un motivo de alegría saber que ya está allí”, manifestó. Rememoró que Cuquejo fue el obispo que lo recibió como seminarista.

Monseñor Cuquejo, un pastor que acompañó a su pueblo

Edmundo Valenzuela, también arzobispo emérito de Asunción y quien presidió ayer la misa de las 15:00, recordó que monseñor ha realizado un gran servicio. “Uno de los servicios más importantes, patrióticamente e históricamente, ha sido aquella noche del 2 de febrero, cuando él dirigía Radio Cáritas”.

“En medio de esa convulsión, de ese susto, él nos tranquilizaba y nos decía: ‘Todo va a ir bien, todo volverá a la calma’. Ese es el servicio de un pastor que acompaña a su pueblo y que hace que su pueblo escuche la voz de su pastor y se disponga a la reconsideración”, comentó. El relato hizo referencia a la noche en que se derrocó al dictador de nuestro país, Alfredo Stroessner, la madrugada del 2 y 3 de febrero de 1.989.

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Alan Wood Cuquejo, sobrino de Cuquejo, indicó que monseñor fue como un padre para él y sus dos hermanos. “Era muy disciplinado, muy organizado y previsor. Muy sacrificado también, no había horas en términos de trabajo, si tenía que estar como misionero, no importaba la hora, si llueve o si hace calor ni las condiciones”, recordó.

Pastor Cuquejo, comprometido con la realidad del país

“La gente le quería mucho porque él siempre fue muy abierto, pero también muy prudente, eso es lo que hizo que tenga un perfil bastante amplio”, añadió Alan Wood Cuquejo.

“Siempre tuvo una mirada sobre las políticas. No voy a decir denunciaba, pero siempre ponía al frente lo que estaba pasando con la realidad del país. Tanto es así que cuando vino el Papa Juan Pablo II, él estuvo a cargo justamente de ese rol que él cumplía entre la Iglesia y el Gobierno”, expresó Wood. “El nunca se compró nada, nunca le vi comprar algo para él”, finalizó.

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Para hoy se prevén cuatro misas exequiales en la Catedral Metropolitana, a las 6:15, 9:00, 11:00 y 15:00. Esta última estará a cargo del cardenal paraguayo Adalberto Martínez. También para las 15:00 se tiene programado el sepelio, en el mismo lugar.

Pastor Cuquejo tuvo una vida dedica a Dios y a los estudios

Pastor Cuquejo nació en San Estanislao, departamento de San Pedro (hoy Diócesis de San Pedro Apóstol), el 20 de setiembre de 1939. En marzo de 1957 ingresó al Seminario de los Misioneros Redentoristas en Bella Vista, Buenos Aires, Argentina, y en diciembre del mismo año comenzó el año del Noviciado, en Manuel Ocampo.

El 2 de febrero de 1959, emitió su Profesión Religiosa en la Congregación de los Misioneros Redentoristas. En marzo de ese mismo año viajó a los Estados Unidos de América para realizar estudios de filosofía y teología en el Seminario Mayor de los Misioneros Redentoristas, en el pueblo de Esopus, Nueva York.

Cuquejo fue ordenado sacerdote por el cardenal Francis Spellman, Arzobispo de Nueva York, el día 21 de junio de 1964, en el marco de los festejos de Nuestra Señora del Perpetuo Socorro.

En agosto de 1975, se trasladó a Roma, Italia, para realizar los estudios de postgrado en Teología Moral. Obtuvo la Licenciatura con el grado «Summa cum Laude», en la Academia Alfonsiana, adjunta a la Pontificia Universidad Lateranense de Roma, en junio de 1977.

Pastor Cuquejo fue devoto de San Roque González y la beata Chiquitunga

El Papa Juan Pablo II lo nombró el 26 de junio de 1982, Obispo Titular de Budua y Auxiliar de Asunción, siendo ordenado por el Arzobispo de Asunción, monseñor Ismael Rolón Silvero, el 15 de agosto del mismo año, fiesta de Nuestra Señora de la Asunción, en la Catedral Metropolitana.

Cuquejo fue nombrado Arzobispo Metropolitano de la Arquidiócesis de Nuestra Señora de la Asunción, el 15 de junio del año 2002 por el Papa Juan Pablo II.

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Monseñor Cuquejo fue fiel devoto de San Roque González de Santa Cruz y de la beata María Felicia de Jesús Sacramentado «Chiquitunga». En su cruz pectoral, con la que se lo vio en sus últimas apariciones públicas como Arzobispo emérito, portaba una reliquia de nuestro santo paraguayo y en su anillo llevaba una reliquia de la beata.