Créditos de carbono: Peña y De Barros defienden la ley promulgada e ignoran críticas

Santiago Peña promulgó ayer la ley de Créditos de Carbono, una iniciativa legislativa que fue aprobada en el Congreso prácticamente sin debate, lo cual fue cuestionado incluso por algunos colorados antes de cambiar de opinión.

“Gracias a ella, nuestro país podrá acceder a recursos conservando nuestro medio ambiente”, señala el presidente en un tuit en el cual se adjunta un video sobre la ley promulgada y donde aparece el ministro del Ambiente, Rolando de Barros.

“Para el Paraguay, este es un hecho trascendental que representa innovación, avance, en todo lo que implica políticas de sostenibilidad y realmente la ley de créditos de carbono va a contribuir enormemente para el crecimiento y desarrollo del país, donde podemos tener un doble impacto, conservar y manejar sosteniblemente nuestros recursos para potenciar nuestros sistemas de producción”, señala De Barros.

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Aseguró que la “herramienta contribuye directamente a la conservación, protección y manejo sostenible de los recursos naturales”, mientras paralelamente se compartían videos de automóviles contaminantes y del sector agrícola.

Ley aprobada sin debate ni modificaciones

El proyecto de créditos de carbono fue aprobado por la “aplanadora colorada” prácticamente sin debate en las Cámaras del Congreso. En el Senado, el proyecto fue cuestionado duramente porque los proyectistas iban haciendo correcciones sobre la marcha y no permitieron siquiera consultas en la sesión.

Además, en su momento, varios legisladores cuestionaron algunos artículos que deberían ser estudiados, más allá de que el proyecto podría ser positivo. El principal cuestionamiento fue la falta de debate y modificaciones, no el origen del proyecto en sí.

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En Diputados, los opositores solicitaron aplazar el estudio por tres semanas para realizar ajustes a la propuesta. Por ejemplo, pedían la inclusión de mecanismos para garantizar la consulta a pueblos originarios y también que se prevean medidas de transparencia para que el Estado deba exigir la documentación sobre las propiedades.

Sin embargo, los senadores colorados y aliados hicieron caso omiso a la solicitud y aprobaron el proyecto sin cambios. Lo mismo hizo Santiago Peña: aprobar sin modificaciones ni sugerencias.

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Algunos cuestionamientos a la ley

• Falta de transparencia
• Dudas con respecto a si las “certificadoras” realmente podrán garantizar el rol de contrarrestar las emisiones contaminantes
• Impediría expropiación de tierras a favor de la reforma agraria
• Altas tasas impositivas podrían hacer inviables proyectos ya vigentes en Paraguay
• No incluye la exigencia de demostrar que los bosques que ingresarán al mercado están en peligro sin el financiamiento del mercado de carbono
• Existen muchas dudas con respecto al método de cuantificación
• No se prevén mecanismos de consultas a pueblos originarios.