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El religioso indicó que para ingresar en la propiedad violentaron la puerta trasera y hasta el momento las tres personas continúan en el lugar. Agregó que el inmueble fue donado por la Fundación Concepción Ferreira al entonces vicario de la Diócesis de Carapeguá, Mons. Herminio Estigarribia. En ese entonces, nadie supo que el religioso tenía un hijo, pero antes de fallecer había dejado el título a sus herederos. Sin embargo, en una de la cláusulas de la donación dice que el predio es donado para fines sociales, pero ahora se pretende utilizar como una vivienda.
El párroco comentó que hace algunos meses apareció Pedro Estigarribia (37) como heredero de monseñor Estigarribia y pidió que se abandone el edificio. Sin embargo, se inició un juicio de usucapión que está a cargo de la jueza Liduvina Otazú, cuya resolución no salió aún.
El sacerdote explicó que mientras no se tenga un resultado o una orden del juzgado no se puede hacer justicia por manos propias, atropellar y apoderarse del inmueble. En el interior de la vivienda quedaron el mobiliario, libros, actas de bautismo y de casamiento, G. 800.000 en efectivo y otros bienes de la Iglesia que no pueden retirar.
Durante el litigio, el hijo del sacerdote Estigarribia vendió la propiedad a su suegro Bernardino Ibarra. Por su parte, Rosana Ibarra de Estigarriba, esposa del hijo de monseñor, manifestó que su padre compró el inmueble para ayudarles porque necesitan un lugar donde vivir porque tienen hijos y les cedió para que puedan vivir allí.
Los afectados en este litigio presentaron sus respectivas denuncias en la comisaría local y el caso fue derivado al Ministerio Público de Ybycuí.