En este grupo se incluyen también los transformadores que habían sido afectados en el incendio ocurrido en el año 2015 en la misma subestación.
Rocío Vely, jefa de la División de Gestión Ambiental de la ANDE, mencionó que estos transformadores necesitan ser reacondicionados de una manera ambientalmente racional.
“Para eso la ANDE trabaja desde hace tiempo en un plan integral de mitigación de pasivos ambientales. Particularmente, estos transformadores en desuso pueden llegar a contener policlorobifenilos (PCB) o bifenilos policlorados, una sustancia cuya fabricación está prohibida y su uso debe darse con ciertas restricciones”, explicó la ingeniera que está trabajando en el proyecto.
Añadió que actualmente cumplen un proceso relacionado con la ejecución del contrato de subasta pública internacional para la enajenación de transformadores en desuso ubicados en el complejo San Lorenzo de la ANDE.
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“Lo que se hace básicamente es tomar muestras de cada transformador depositado aquí, analizarlas en un laboratorio acreditado y posteriormente los transformadores contaminados con PCB pasarán por un proceso de descontaminación, serán reclasificados, y entregados a la empresa ganadora de la subasta pública internacional”, precisó la experta.
El trabajo afectará a 20.000 transformadores y al final del proceso se liberará todo el espacio donde están almacenados los transformadores en desuso.
De acuerdo al nivel de contenido de PCB, estos entrarán en un proceso de declorinación, que consiste en retirar los átomos de cloro. A partir de ahí, los aceites se descontaminarán y se incluye la descontaminación de las partes sólidas, continuó explicando la ingeniera Vely.
“La idea es que todos los transformadores pasen por ese proceso. Si se llegara a escuchar de equipos con un nivel de contaminación mayor, serán muy pocos y se depositarán en los depósitos de seguridad de la ANDE”, adelantó.
Este trabajo forma parte de un proyecto internacional trabajado con el Ministerio del Ambiente, que permitirá a nuestro país eliminar definitivamente la existencia del PCB, aseguran desde la Dirección Ambiental de la ANDE.
El proceso de descontaminación es parte de uno mundial donde organismos internacionales declararan que los bifenilos policlorados son nocivos para el ambiente, por lo que se debe cumplir con las recomendaciones del Convenio de Estocolmo y retirar estos equipos, a más tardar, en 2025.
Dentro de ese paquete de 20.000 transformadores se encuentran los 9.385 que fueron afectados por el incendio del año 2015.