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Esta mañana una gran cantidad de neumáticos estaban siendo incinerados, llenando de humo altamente tóxico a casi todos los barrios de esta ciudad.
La enorme humareda cayó sobre toda la ciudad e incluso sobre las calles céntricas de Ponta Porá, hacia el otro lado de la frontera.
Varios pobladores se hicieron eco por las emisoras locales y por las redes sociales, expresando su preocupación, especialmente en cuanto a la salud de niños pequeños, teniendo en cuenta la peligrosidad de inhalar el aire contaminado que expide la quema de neumáticos usados.
Pobladores cercanos al vertedero municipal indicaron que desde anoche, varios camiones repletos de cubiertas usadas estaban descargando en el vertedero y luego incinineraron los mismos. Incluso esta mañana, un camión de carga repleta de neumáticos usados intentó descargar su carga de cubiertas, pero fue impedido por los vecinos.
Es impresionante observar la cantidad de neumáticos que estaban siendo incinerados en el vertedero municipal, sin que ninguna autoridad intervenga el lugar.
Este grave problema que enfrenta la ciudadanía es de vieja data, ya que constantemente decenas de camiones arrojan miles de cubiertas usadas para luego incinerarlos, sin que ninguna autoridad comunal ni de la gobernación, y mucho menos la Secretaría del Ambiente Seam ni la fiscalía del Medio Ambiente, muevan un dedo para solucionarlo.