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El proyecto aprobado en la Cámara Baja modifica los artículos 82 y 83 del Código Laboral. El cambio consiste en un agregado que establece que los trabajadores que sufran un despido injustificado antes de lograr la estabilidad y ganen la reclamación judicial puedan optar al final por reintegrarse a sus labores. En ese caso, el empleador le deberá pagar sus salarios caídos. Es decir, un empleado prácticamente puede perpetuarse en su cargo.
El ministro de Trabajo, Guillermo Sosa, habló hoy al respecto. Dijo que “cambiar las reglas del juego en el trabajo es una cuestión delicada, que no se puede hacer de manera unilateral”. Sosa cuestionó que los diputados no hayan llamado a una consulta general con empleadores y sindicatos para debatir sobre esta cuestión. “Son cuestiones que se deben tratar en la sociedad. Hacer participar a los gremios, trabajadores, sindicatos. Yo reclamo como Ministerio de Trabajo que deberían habernos consultado. Nos sorprendió totalmente. Tiene que ser consensuado (el cambio)”, manifestó Sosa en conversación con ABC Televisión.
En ese sentido, explicó que los reveses pueden ser muy fuertes para la economía del país porque las empresas –si se aprueba el cambio en el Código Laboral– tendrán una resistencia a contratar empleados. Además, agregó que los inversores que quieran impulsar proyectos en Paraguay difícilmente lo harán si encuentran esta traba. El proyecto será tratado ahora por el Senado, pero Sosa ya adelantó que si el Congreso aprueba los cambios, el Ejecutivo vetará.