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Dijo que en su gestión no buscó ser una especie de yagarrapá de los poderes del Estado sino que se dedicó a reconstruir los cascotes de institucionalidad que esparció el “Nuevo Rumbo”.
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Evitó decir más cosas, seguramente para no salir del corset oficial pero, como el Dr. Merengue, le “ladró” al “Patrão” y a sus “geniolitos” por lo que hicieron y piensan hacer.
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Concluido el informe, Abdo reagrupó su tropa de diputados en el Palacio de López y les instó a seguir en la resistencia. En el Senado, solo le quedó una: Blanca Ovelar, quien ayer le lanzó un duro mensaje al “Patrão” y a sus discípulos.
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El senador que da “pennar”, el joven diputado “geniolito” y los líbero-cartistas están más quemados que Judas kái al inicio mismo del periodo legislativo. Quienes le votaron, seguramente estarán arrepentidísimos.
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Lo bueno es que el viernes cayeron varias caretas, así como los discursos de campaña. A un legislador se le juzga por los votos y los opositores que acompañaron el copamiento se aplazaron.
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“Beto” Ovelar como titular del Congreso permitió largos y repetidos discursos en una sesión en que solamente se tenía que elegir a miembros de la mesa directiva. Se prolongó de más la sesión del viernes y encima se escucharon insultos, autoelogios, rencores, odios y KachiBachi en su papel de siempre.
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Si así serán las sesiones, no se va a legislar nada.
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Una cooperativa hubiese ahorrado el tiempo para cobrar a sus deudores. En la Bicameral estaban varios deudores como KachiBachi, Colym y un tal Hernán Jiménez. Dicen que este chico es el “brazo derecho” del clan Núñez y otro gran beneficiado.
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Si por ahí la Fiscalía se daba una vueltita, también encontraría a varios candidatos para Tacumbú.
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¿Qué pasará ahora con Erico? Seguro que los cartistas dirán que tiene nuevo fuero y que necesitan votar para ver si se somete a la justicia. O sea, “blindaje”.