Flagelo de la adicción

Este artículo tiene 2 años de antigüedad

Luego de la pandemia se observa una creciente cantidad de personas que cayeron en la adicción a las drogas y que deambulan por las calles de Ciudad del Este y municipios vecinos.

La semana pasada se habilitaron mejoras en la única clínica de desintoxicación de la región para contrarrestar el flagelo de la drogadicción, aunque se necesita de más profesionales para la tarea.

En los dos últimos años han aumentado las personas en situación de calle en Ciudad del Este y en su área metropolitana; están en estado de abandono y la mayoría está visiblemente perturbada, una señal que sugiere que se encuentran atrapadas en la adicción a las drogas.

El flagelo de la drogadicción no solo los deja perturbados, sino también les reduce la perspectiva en la vida. Sobreviven de la caridad en los semáforos en el “mejor de los casos” y algunos hasta son violentos con los que no entregan alguna dádiva.

La drogadicción y la delincuencia en ciertas ocasiones están unidas. Además del tráfico ilegal de drogas, los afectados por la adicción en algunas circunstancias recurren a hechos ilícitos como hurto, robo, extorsión, entre otros, para financiar la compra de las sustancias estupefacientes.

Todos los beneficios, en un solo lugar Descubrí donde te conviene comprar hoy

Según datos del Centro de Desintoxicación, las drogas más consumidas en el este del país son el crack y al alcohol. El primero predomina en la población más joven y el segundo en los adultos.

La adicción afecta a personas desde los 12 a los 75 años. En promedio ocho pacientes por día son atendidos en la clínica de desintoxicación de Ciudad del Este desde su habilitación en 2016.

Con las mejoras de la clínica de desintoxicación, se pretende contrarrestar el incremento continuo de la drogadicción en la zona este. Sin embargo, la estructura no es suficiente si se carece de la cantidad requerida de profesionales para asistir a los afectados. Actualmente prestan servicio en la clínica tres psicólogos, dos médicos clínicos y una enfermera.

Según los responsables del programa de desintoxicación, la clínica también requiere de abogados considerando que en la mayoría de los casos están relacionados con problemas judiciales. Si el combate es a medias, la drogadicción continuará ganando terreno.

fredy.flores@abc.com.py