Relatan insólito caso sobre compra de camioneta clonada a su vecino

Cada vez son más las historias de clonación de vehículos. Ayer se hizo público el caso de una camioneta Toyota Fortuner ilegal modelo 2021 comprada por una persona de Coronel Oviedo. Lo insólito es que los documentos de ese vehículo pertenecían a un rodado idéntico, pero en poder de su vecino. Denuncian llamativos movimientos de la Policía Nacional apenas se concretó el negocio.

Fotos de la camioneta cuando estaba a la venta
Fotos de la camioneta cuando estaba a la venta en redes sociales.

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La comercialización de vehículos clonados está muy en boga en el país. Y es que los casos de personas afectadas por este “negocio” suman tras la detención de la funcionaria del Ministerio Público Claudia Guillén, con una camioneta robada en Brasil, pero que circulaba por nuestro país con documentos de otro rodado.

Ayer apareció el caso de otra camioneta adquirida por una familia de Coronel Oviedo. Sorprendentemente, la documentación de este vehículo resultó ser la clonación de otro rodado que pertenecía al vecino de los compradores.

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Una desilusión para los compradores

Sara Dávalos es el nombre de una de las integrantes de la familia que terminó siendo estafada por una presunta rosca de clonadores que opera impunemente en el país. La mujer relató ayer a ABC el calvario que vive desde finales de octubre pasado cuando su marido y su hijo concretaron la compra de una camioneta Toyota Fortuner, año 2021.

Para ellos era el vehículo de sus sueños y la adquirieron por US$ 40.000, de los cuales entregaron una camioneta Kia Santa Fé, año 2019, valuada en US$ 20.000, más de 90 millones en efectivo y cheque por el monto restante.

El dinero era producto de ahorros de casi toda una vida a más de un préstamo obtenido con una entidad bancaria, según los datos.

Dávalos relató que la compra se concretó luego de mucho buscar por redes sociales hasta que apareció la oferta en una aparente playa ubicada en la ciudad de Capiatá, cuyo nombre no pudo recordar; sin embargo, detalló que se trataba un lugar en donde había otros vehículos de alta gama e incluso varios camiones de gran porte.

Todo parecía original a la hora de comprar la camioneta

La mujer relató que el negocio se cerró el 22 de octubre del año pasado. Comentó que al observar los documentos todo parecía original (cédula verde, títulos y chapa) e incluso estaban a nombre de un vecino de ellos, que había sido sondeado días antes sobre la venta de su camioneta, pero no compraron del mismo en forma directa porque no aceptó otro vehículo como parte de pago.

Reiteró que para su hijo y esposo todo parecía legal, además al conocer los orígenes del rodado tuvieron más interés. Dijo que igualmente su familia, antes de cerrar el trato, intentaron comunicarse con el titular de la documentación. Sin embargo, no les atendió la llamada ni respondió los mensajes pese a que fueron leídos, según dijo.

Al no tener respuesta y considerar que era un vehículo con toda la documentación, procedieron a la compra, relató.

Dávalos señaló que, una vez concretado el negocio, su marido e hijo emprendieron viaje rumbo a Coronel Oviedo. En el trayecto, funcionarios del Banco Nacional Fomento (BNF) se comunicaron con su familia para confirmar el pago del cheque emitido minutos antes por el vehículo. Esto se aprobó sin dudar porque estaban seguros que todo era legal, señaló.

Policía apareció minutos después de la compra

Lo llamativo, de acuerdo al relato de la mujer, comienza luego de efectivizarse el cheque y es que mientras su familia aún estaba rumbo a Coronel Oviedo, efectivos policiales que se identificaron como personal de investigaciones llegaron a la casa de su vecino para solicitarle un peritaje de su camioneta porque existía sospechas de clonación. Esto es lo que le comentó al día siguiente el propio vecino a su hijo cuando se interceptaron en una de las calles de esa ciudad, según Dávalos.

Relató que su familia reclamó al vecino el hecho que no les atendiera la llamada para evitar la compra. Añadió que inmediatamente ambos procedieron a radicar su denuncia en la fiscalía zonal para luego ser derivada a Asunción. Actualmente la investigación está a cargo de la fiscal Natalia Cacavelos.

Mismo escribano

El contrato de compra-venta por la camioneta clonada a favor de la familia de Coronel Oviedo habría sido protocolizado por el escribano Julio Cáceres Carrillo, según el documento en poder de ABC. Sorpresivamente, este profesional es el mismo que aparece como el que expidió una constancia de inscripción de cédula verde para la camioneta robada en el Brasil y encontrada en poder de la funcionaria de la Fiscalía.

Doble “clonación”

La familia de Coronel Oviedo no solo compró un vehículo con documentación clonada sino también sufrió la duplicación de los papeles de la camioneta Santa Fe, año 2019, que entregaron en octubre pasado como parte de pago. Esto quedó evidenciado tras la denuncia realizada por los afectados.

Precisamente ayer, Sara Dávalos relató que todo el trato para la venta de la camioneta Fortuner estuvo a cargo de una persona que identificó como Haseitel. Este apellido coincide con Augusto David Haseitel Almirón, conocido presunto “clonador” de vehículos y con un “chorizo” de antecedentes por apropiación en el año 2018 y por homicidio culposo, estafa y producción de documentos no auténticos en 2016. También por estafa en 2015, 2013, 2011, 2009, así como por apropiación en 2014 y 2012.

Quisimos conocer la versión del comandante de la Policía Nacional, comisario Gilberto Fleitas, sobre el actuar de los efectivos policiales en este caso, pero no respondió nuestras llamadas ni mensajes.

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