5 de diciembre de 2025

Médicos del Hospital Regional de Villarrica, en Guairá, denuncian que desde hace ocho meses carecen de lámpara cialítica en el quirófano, por lo que operan solo en casos de extrema urgencia, usando linternas. Las demás cirugías se derivan a un sanatorio privado.




Tras la trágica muerte de Osman Eliel, el recién nacido que no recibió atención en una unidad de terapia intensiva neonatal supuestamente habilitada en Villarrica, sus padres presentaron una denuncia penal. La causa fue trasladada a Asunción, pese al reclamo de la familia, y un informe oficial revela graves irregularidades en la inauguración del servicio médico.

El informe de auditoria de la Superintendencia de Salud confirma que el bebé que falleció por falta de terapia neonatal en el Hospital Regional de Villarrica, mostró signos de alerta a los 15 minutos de nacido, pero pese a ir empeorando, demoraron cinco horas en pedir su traslado a otro hospital, lo que llevó otras cinco horas en materializarse por falta de una ambulancia en condiciones. La UTI neonatal en Villarrica fue desmantelada horas después de su inauguración, de la que participaron Santiago Peña y la ministra de Salud, María Teresa Barán.

El informe de auditoría realizado por la Superintendencia de Salud revela una precipitada habilitación de la terapia neonatal del Hospital Regional de Villarrica, propiciando esto la muerte de un recién nacido. Testimonios del personal involucrado evidencia además, las mentiras de la ministra de Salud, María Teresa Barán, que se lavó las manos destituyendo a subalternos.

La Dirección de Control de Establecimientos del Ministerio de Salud, respondió al lapidario informe de la Superintendencia de Salud, realizado al servicio neonatal del Hospital Regional de Villarrica. La auditoria fue realizada tras la muerte de un bebé recién nacido que no tuvo acceso a los cuidados intensivos en el servicio de Guairá, pese a una pomposa inauguración realizada días antes por el propio Santiago Peña y, autoridades sanitarias.

La Superintendencia de Salud emitió un lapidario informe sobre la auditoría realizada en el Hospital Regional de Villarrica, tras la muerte de un recién nacido que no recibió atención terapizada, porque el servicio neonatal habilitado pocos días antes, había sido desmantelado. La inauguración del espacio había sido realizada fastuosamente por el propio presidente de la República, Santiago Peña, la ministra de Salud, María Teresa Barán y otras autoridades. El informe revela conclusiones graves y falencias en todo el proceso asistencial.