¿Vamos a convertirnos en gran exportador de energía limpia y renovable o usar la energía en producción rentable, cambiando la matriz energética, aprovechando todo nuestro potencial?, esa es la cuestión en este 2023, año de inflexiones para Itaipú y para los gobiernos de Brasil y Paraguay, señaló el ex canciller Rubén Ramírez Lezcano en entrevista con ABC.
¿Es posible que Paraguay encuentre una oportunidad en el conflicto bélico de Rusia y Ucrania? Hoy vemos indeseables consecuencias locales en los mercados de la carne y de combustibles, pero se podría aprovechar la coyuntura para trazar un plan país en esos rubros, según explicó el Dr. Manuel Ferreira.
A pesar de que las rachas de los pronósticos de recuperación económica del país arrecian, con estimaciones oficiales de crecimiento del 4,5% para el Producto Interno Bruto (PIB) y hasta del 6,6% para su sector secundario, el ritmo de crecimiento de la demanda electricidad -apenas 1,8% en los primeros ocho meses del año- sin dudas es la muralla contra la cual se estrella cualquier abuso de optimismo.
Que el mayor productor del planeta de energía limpia y renovable, tal como acostumbran propagandizar hasta los jefes de turno del Estado paraguayo, inclusive en foros internacionales, registre en su esquema de uso final de energéticos apenas el 19% como territorio de la hidroelectricidad confirma el carácter contradictorio de nuestro presente.
El economista norteamericano, Jeffrey Sachs, sugirió anoche al Gobierno nacional revisar la matriz energética del país, y hacer depender la economía en un 100% de la energía renovable, como la hidroeléctrica, abandonando el uso de biomasa (madera y carbón) y los hidrocarburos.
La electricidad sigue ocupando la menor parte de la matriz energética, según confirmó ayer el viceministro de Energía, Mauricio Bejarano, con motivo de la reunión del Comité Nacional de Energía que se lleva a cabo hoy en Itaipú, Hernandarias.