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En 2003 se realizaron reformas en la Caja de Jubilaciones y Pensiones o Caja Fiscal a través de la Ley N° 2345, lo que mejoró su situación financiera año a año hasta 2012, pero luego volvió a deteriorarse con la aprobación de diferentes regímenes especiales.
Los datos forman parte del informe elaborado el año pasado por Hacienda y el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) sobre los riesgos fiscales de Paraguay, que incluye análisis relacionado con las condiciones de vulnerabilidad de la situación fiscal y de deuda pública.
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El informe explica que, tras la reforma, entre 2007 y 2021, se crearon nuevos regímenes especiales de jubilación que anteriormente formaban parte del sector empleados públicos o administración pública.
Los nuevos regímenes creados
Los nuevos regímenes son: enfermeros, obstetras, médicos, odontólogos, bioquímicos y psicólogos del Ministerio de Salud Pública, médicos de todos los organismos y entidades del Estado y empresas públicas, docentes en educación inclusiva, agentes de la Patrulla Caminera, guarda-parques y trabajadores con discapacidad de la función pública.
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Añade, que estos nuevos regímenes provocaron una reversión de los efectos de la reforma del 2003, debido a que tienen parámetros diferentes al del programa contributivo civil, en cuanto a la edad mínima de jubilación, años de aporte, tasas de sustitución y el salario base para el cálculo de la jubilación, aunque todos los sectores aportan el 16% de las remuneraciones.
“Esta heterogeneidad de parámetros entre los sectores indica una señal de inequidad para el acceso a los beneficios entre los programas de jubilación”, indica.
Luego de la reforma, la Caja Fiscal mejoró
El informe resalta dos puntos, primero que posterior a la reforma de 2003 la situación financiera de la Caja mejoró anualmente, pasando de un déficit de 0,1% del PIB en 2008 hasta alcanzar en 2012 un superávit de cerca de 0,2% del PIB, unos US$ 259 millones, pero luego volvió a deteriorarse anualmente, hasta llegar a cerca de 0,4% del PIB en 2021, equivalente a US$ 181 millones.
En segundo lugar, menciona que los sectores de empleados públicos, magistrados judiciales y docentes universitarios registraron superávit en todos los años del periodo analizado, caso contrario a lo observado en los sectores de magisterio nacional, Fuerzas Armadas y Fuerzas Policiales.
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Señala que desde 2008 a 2021, la situación financiera global de la Caja Fiscal exhibió un déficit de cerca del 1,9% del PIB (unos US$ 681 millones), que se explica por los déficits acumulados de los sectores de las Fuerzas Armadas (2,5% del PIB), Fuerzas Policiales (1,6% del PIB) y magisterio nacional (1,5% del PIB), compensado parcialmente por el superávit acumulado proveniente principalmente de los empleados públicos (3,2% del PIB).