“Estamos todos consternados. Luchamos mucho, pero no pudimos vencer la falla renal y hepática (riñones e hígado)”, explicó la jefa de Cardiología del citado centro asistencial, doctora Nancy Garay.
En horas de la siesta de ayer un informe médico señalaba que el paciente respondía bien al injerto del mencionado órgano vital, así como a las medidas terapéuticas adoptadas.
El pequeño había presentado una falla cardiaca del injerto que se le trasplantó hace 7 años en Argentina, en el Hospital de Pediatría “Prof. Dr. Juan P. Garrahan”, por lo que requirió otro trasplante, que se concretó los mencionados días.
Hace dos meses volvió al país con su familia para el retrasplante, debido a que actualmente el Paraguay ya cuenta con un programa para esa clase de intervención y ante un pedido de las autoridades del mencionado centro asistencial del vecino país.
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El donante del cual recibió el corazón que le injertaron en dicha ocasión también beneficia a dos personas más, para trasplantes de riñón.
