“Les dije que pagaran”

Notoriamente molesto, Eduardo Heisecke aseguró primero que nunca presionó a los inversionistas extranjeros para que pagaran el millonario monto solicitado por Ana Mora, la abogada que él mismo les presentó como de su confianza. Sin embargo, poco después reconoció que sí les dijo que debían pagar porque existía una deuda con ella, pero que no hacía referencia a pagar lo solicitado por ella, sino a negociar.

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“Te estás refiriendo a una grabación en la cual les digo ‘tenés que pagar, tenés que pagar’. No les digo que tienen que pagar seis millones de dólares; tienen que negociar con ella. No quieras sacar de mi boca”, señaló Heisecke. Hasta ese momento no le habíamos hecho ni siquiera una mención de la existencia de audio alguno.

Tampoco hizo falta que se mencionara siquiera el nombre de Juan Carlos López Moreira Borgognon, puesto que fue el propio Heisecke quien nombró a su socio comercial, para asegurar que todo en realidad busca señalarlo a él como responsable. “Al final de todo, es contra mi socio, no en contra mía”, aseguró.

Afirmó que si no pidieron asistencia del gobierno para el desalojo de los invasores que asediaban la mina, fue porque aún no había asumido Horacio Cartes. Sin embargo, su “amigo” Emilio Buongermini ya había asumido como viceministro de Minas y Energía, cargo que obtuvo con la llegada del actual gobierno.

“Ustedes no saben la fecha, quieren sacar nomás. Y saquen. No tenés forma más que la famosa grabación, que, por cierto, yo también les grabé, que espero que saquen completo, en el cual se van a hablar a todo el mundo y decirles que yo les extorsionaba. Les llamo a reclamar eso, y como soy muy nervioso, capaz me exalté”, refirió.

El propio Buongermini refirió en un mensaje a los inversionistas que tenían que llevar el dinero para pagar a Ana Mora a la oficina de Heisecke, y entregárselo a este. El empresario dijo, que en realidad, hacían referencia a un cobrador de una empresa de seguridad a cuyo dueño también él había presentado a los inversionistas y al que debían dinero. “El cobrador de la empresa estaba en la oficina. Les quiso decir que tenían que ir a dejar (el dinero), porque capaz pensaron que yo soy dueño de la empresa de seguridad”, aseveró. 

Dijo que nunca prestó dinero a los dueños de la empresa minera y que los pagarés que estos presentaron para denunciar ello son falsos. Aseveró, además, que el monto escrito en el pagaré es el mismo que los extranjeros debían a la empresa de seguridad.

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