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La profesional indicó que las orquídeas son consideradas como las flores más nobles y a la vez enigmáticas de la naturaleza porque viven del aire y la luz. Lejos de la creencia generalizada sobre la dificultad de su producción, esta planta es de fácil cultivo y cuidado, expresó. Recordó que el taiwanés ingeniero agrónomo Carlos Lee fue quien introdujo en nuestro país más de 120 nuevas variedades e hizo que la flor se ganará mayor presencia.
El ingeniero Lee culminó su labor en el país y luego de jubilarse retorno a Taiwán, pero sus enseñanzas quedaron y siguen siendo replicadas en el centro de floricultura de esta ciudad, expresó.
Indicó que anteriormente los plantines tardaban tres años para florecer, pero ese lapso se ha reducido bastante con las nuevas técnicas y se consigue que en un año ya estén en plena floración, según las técnicas de cultivo.
El 90% de las orquídeas son epífitas, es decir, viven sobre otra planta, sin alimentarse a expensas de esta. Por tanto, se las puede colocar sobre el tronco de un árbol. Tampoco necesitan de mucha agua.
Los interesados en cultivarlas deben saber que la luz es muy importante, pero siempre hay que tener en cuenta la variedad y la especie. Las Cattleyas, por ejemplo, necesitan más luz, y las Phalaenopsis, menos. Los plantines deben ubicarse en sombra y a medida que van creciendo se les provee de más luz.