Conocé tu horno

Muchos de los fracasos culinarios, que todos hemos sufrido alguna vez, derivan de errores en la temperatura. Una torta que se dora por afuera, pero queda cruda por adentro, una carne que se arrebata, un budín que tarda más de lo previsto y pareciera que nunca termina de cocinarse… Todos los cocineros deberían aprender a conocer su horno, y descubrir cuál es la temperatura real y las zonas más calientes que pudiera tener.

https://arc-anglerfish-arc2-prod-abccolor.s3.amazonaws.com/public/YYBTUAGYPBGKHGHHOAWAY5YAOE.jpg

Cargando...

Nuestras abuelas ya lo sabían, conocían a la perfección su cocina y las “mañas” de su horno, motivo por el cual todas sus comidas eran espectaculares. Más tarde, cuando compraron un horno nuevo (o recibieron uno de regalo), se dieron cuenta de que las mismas recetas no salían igual. 

Lo cierto es que pocos hornos alcanzan la temperatura exacta que marca su indicador, incluso en las gamas más lujosas, que tienen mecanismos de mayor precisión. Puede que la variación, por exceso o defecto, parezca mínima, pero para ciertas recetas de esa diferencia depende el éxito o fracaso. La mayoría de los hornos suelen calentar más de lo que deberían. Si es el caso, y después de hacer algunas pruebas más, deberemos tomar nota de ello y tenerlo siempre en cuenta a la hora de elaborar cualquier receta.

¿Cómo medir el calor?

Para conocer la temperatura real de nuestro horno lo más sencillo es conseguir una hoja de papel y un reloj con segundero o cronógrafo.

1.- Encendemos el horno y lo precalentamos 10 min a cualquier temperatura.

2.- Ponemos una hoja de papel en la rejilla media del horno.

3.- Usando el reloj, tomamos el tiempo que demora en dorarse la hoja de papel y verificamos la temperatura del horno según el resultado.

Si el papel se dora en:

30 s: el horno está muy caliente. Esta temperatura es de 250 a 300 ºC.

60 s: el horno está caliente. Esta temperatura media/caliente es de 200 a 250 ºC.

90 s: la temperatura es media o moderada, entre los 150 y 200 ºC.

3 o 4 min: la temperatura es baja, entre 120 a 150 ºC.

Si mantiene su color pasado los 4 min, es que el horno está a temperatura muy suave, es decir, entre 100 a 120 ºC.

Importante: esta prueba solo sirve por una vez. Para iniciar un nuevo test hay que dejar enfriar el horno o esperar a que baje la temperatura completamente antes de meter otro papel, porque al mantenerse el calor dentro del horno se pueden obtener resultados equivocados.

Áreas más calientes

Otro aspecto interesante a considerar a la hora de trabajar con hornos son los llamados “puntos calientes”, áreas en donde el calor del horno es más fuerte. Muchos modelos tienen este problema, que el calor no es parejo en todo el interior del horno o no calientan por igual en todas sus partes. Es por eso que muchas recetas recomiendan girar la bandeja de lo que estemos horneando a mitad de la cocción, para conseguir un horneado uniforme. Algunos hornos eléctricos solucionan este problema con un ventilador que esparce el calor dentro del horno.

Pero podemos saber con exactitud por dónde calienta más nuestro horno; basta con hacer un pequeño experimento.

1. Precalentar el horno a unos 200 ºC.

2. Forrar una bandeja con papel manteca.

3. Llenar su superficie con rebanadas de pan blanco de molde y llevar al horno a media altura. 

4. Esperar unos 10 a 15 min, hasta que se hayan dorado todas. 

5. Sacar y observar los resultados. Si el horno tiene puntos calientes, habrá rebanadas que se habrán tostado más y será fácil identificarlos.

Esto también deberíamos tenerlo en cuenta a la hora de hornear cualquier receta, por ejemplo galletas, para evitar que unas se quemen o que otras queden poco cocidas.

Las variaciones de temperatura son algo común en los hornos domésticos. Pero si llevamos a cabo estas comprobaciones y descubrimos que nuestro horno no logra alcanzar la temperatura deseada, o que la excede demasiado, convendría contactar con el servicio técnico. Podría tener algún error en su mecanismo o necesitar que un reajuste de su termostato. Un horno estropeado podría darnos más sustos que una torta quemada.

Enlance copiado
Content ...
Cargando...Cargando ...