El sector turístico europeo pide el fin de las restricciones por ómicron

"Esto ha destrozado los planes de innumerables miles de personas que esperan cruzar las fronteras para ver a amigos y familiares durante las vacaciones, y pone una vez más a los agentes y operadores en peligro financiero", señalaron en un comunicado la Asociación Europea de Agencias de Viajes y Touroperadores, la Asociación Europea de Turismo, la Asociación de Hoteles, Restaurantes, Bares y Cafés y Consejo Mundial del Viaje y el Turismo.

Países como Italia, Grecia o Portugal empezaron a reclamar test negativos en SARS-CoV-2 a todos los viajeros que entren en su territorio, aunque estén vacunados.

Francia endureció ayer las medidas a las personas procedentes del Reino Unido a los que exigirá un test negativo para poder entrar al país y pedirá que ofrezcan un motivo "imperioso" por su viaje.

Ante esta situación, las asociaciones del sector turístico reclamaron a los gobiernos de la UE que apliquen el acuerdo que alcanzaron ayer los jefes de Estado y de Gobierno en la cumbre que celebraron en Bruselas, en la que se comprometieron a no aplicar restricciones que obstaculicen "de manera desproporcionada" la libre circulación dentro de la UE.

Pidieron también que sigan las recomendaciones del Centro Europeo de Prevención y Control de Enfermedades (ECDC), que en su informe de esta semana dijo que las restricciones a los viajes "probablemente no serán relevantes por mucho más tiempo" porque la variante ómicron ya está "en muchos países" de la Unión Europea (UE) y el Espacio Económico Europeo.

"Cambiar las restricciones de viaje con muy poca antelación debilita la confianza en los viajes y socava todos los esfuerzos que se han realizado hasta ahora, incluido el Certificado Covid Digital de la UE para levantar las restricciones de movimiento para las personas vacunadas y recuperadas", dijeron las asociaciones en el comunicado.

Las pernoctaciones en los países de la UE descendieron un 71 % en la pasada temporada de invierno, respecto a la última previa a la pandemia, entre 2018 y 2019, según los datos que ofrecieron las organizaciones.

"Este también es un período importante para planificar las próximas vacaciones de verano. Con restricciones de viaje erráticas, Europa volverá a perder una importante temporada turística", avisaron.