“El espíritu del proyecto es que nosotros vamos a trabajar con aquellos referentes de ollas populares. Los organismos de la sociedad civil pueden pedirnos insumos para las ollas populares”, explicó Roa en conversación con ABC este jueves.
La SEN trabajará en ese sentido con el Ministerio de Desarrollo Social (MDS) y el Instituto Paraguayo del Indígena (Indi). “Vamos a poder determinar quiénes son los responsables (…) Voy a revisar, a chequear, no voy a delegar nada. Capaz delegue la capacidad operativa. No tengo la capacidad de cocinar para 100 ollas, 200 ollas”, añadió Roa.
El monto asignado para el cumplimiento es de G. 35.000 millones que serán distribuidos de la siguiente manera: G. 15.000 millones a la Secretaría de Emergencia Nacional (SEN), G. 10.000 millones al Ministerio de Desarrollo Social (MDS) y G. 10.000 millones al Instituto Paraguayo del Indígena (Indi), según sea el caso, para la compra de los insumos alimenticios a ser distribuidos a las diferentes comunidades.
“Yo no voy a entregar plata. La ley difiere del trabajo tradicional nuestro en una unidad métrica… Voy a entregar por kilo, normalmente es un kit por familia. En este contexto se hace un cálculo por persona y eso me da una cantidad por olla. También en cuanto al tipo de producto: yo no puedo comprar carne ni verduras, no tengo la cadena de frío. Va a ser catastrófico si entrego carne en mal estado”, detalló.
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Roa dijo además que funcionarios de la SEN recorrerán estas comunidades. “Voy a estudiar el mejor mecanismo para poder instrumentar. Es un mecanismo diferente a como estamos trabajando”, sostuvo.
Sobre la posible politización de estas ollas populares o si políticos pueden sacar provecho de esta situación, respondió que, si bien se dan denuncias en todo caso, las mismas personas dentro de las comunidades no toleran esto.
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“Si tenemos la denuncia, siempre corregimos. Siempre hay denuncias, la gente te dice (por la contraloría ciudadana). Tuve pocas hasta ahora. Por ejemplo, en asentamientos hay dos líderes (de ollas) y esos líderes tienen la conexión del 100% de un asentamiento. Relacionándome con ellos llego a todo el asentamiento. Hay veces en donde entra el tema político. Acá lo importante es que vamos a poder llegar a la gente hoy con un mecanismo que permite alcanzar a un mayor número de beneficiarios”, concluyó Roa.
La decisión de aprobar la ley queda en manos del Ejecutivo. Las organizaciones que hacen las ollas populares en todo el país insisten en que esto es muy beneficioso para las personas más vulnerables que no tienen siquiera qué comer debido a la crisis del coronavirus.