Habilitan el refugio biológico Mbaracayú para recorrido turístico educativo

La apertura oficial al público de dicha reserva inaugura una nueva etapa del Refugio que por años estuvo en proceso de reforestación, tras un acuerdo con el Brasil que lo había convertido en un refugio binacional. La misma está sobre la zona donde existían los Saltos del Guairá, inundadas con la creación de la represa de Itaipú.

Desde la fecha, las actividades que pueden ser realizadas en el lugar incluyen circuitos como el Sendero “La Esperanza”, con 970 metros lineales, con estaciones interpretativas; el Centro de Interpretación, espacio habilitado exclusivamente para brindar información acerca de la fauna y flora, los procesos de restauración ecológica y la historia del refugio. Ambos trayectos serán totalmente guiados.

Otro de los puntos habilitados para el visitante es el Muelle, desde donde se disfrutará del inigualable paisaje del embalse de Itaipu y la fauna tanto acuática como terrestre de la región. Una actividad independiente al circuito habitual podrá ser realizada en el Mirador de Aves. Este espacio se encuentra preparado para el avistamiento de aves, con las comodidades necesarias para su desarrollo, según los responsables.

Los días de atención a visitantes del Refugio Biológico Mbaracayú, previa reserva, serán de miércoles a domingo, en los horarios: 08:30 hasta las 16:00.

La ministra de turismo, Sofía Montiel de Afara, resaltó el gran trabajo que se ha hecho en el lugar durante casi 40 años para restaurar la fauna, que anteriormente era una estancia brasileña. Dijo que gracias al proceso lento, pero continuo hoy la Itaipú puede entregar a la ciudadanía un nuevo espacio natural que se suma a los atractivos del complejo turístico de la Entidad.

El objetivo de esta iniciativa es potenciar el turismo educativo y de naturaleza en la zona de influencia de la represa.

Itaipú cuenta con ocho reservas naturales que totalizan 63.760 hectáreas. El 27 de junio de 1984 fueron creadas las Reservas Naturales Limoy, Itabo, Tatí Yupí y el Refugio Biológico Mbaracayú (binacional). Estas áreas verdes, junto a las Reservas Naturales Pikyry, Yvyty Rokái, Carapã y Pozuelo (creadas entre el 2008 y 2014), conforman el Sistema de Áreas Protegidas. En mayo de 2017, el Ministerio del Ambiente y Desarrollo Sostenible (MADES) aprobó, por resolución, declarar a las 7 reservas como Áreas Silvestres Protegidas (ASP).

Resaltaron igualmente que las reservas naturales son zonas núcleos de la Reserva de Biosfera Itaipu, reconocida por la UNESCO en el año 2017. En ellas se realizan actividades de manejo, uso público, protección y vigilancia, investigación y gestión.

La vigilancia de estos recintos está a cargo del equipo de guarda parques de Itaipú y el manejo y conservación a cargo de la División de Áreas Protegidas. Existen varios proyectos y trabajos ejecutados en conjunto con otras divisiones, como: reforestación, educación ambiental, relevamiento de macroalgas, entre otros.