Según el Dr. Martín Guzmán, director del centro asistencial, cambiaron radicalmente los planes con el ingreso del frío ya que los casos de dengue y chikunguña descendieron, dando paso a una sobreavalancha de pacientes que acuden a consultorios y urgencias con cuadros respiratorios, a quienes se deben dar respuestas en forma inmediata.
Los profesionales de la salud deben lidiar con los cuadros de influenza A y B, H1N1 y las remisiones del Covid-19 que son las variantes más recurrentes en los pacientes adultos y menores.
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La respuesta del Hospital de Curuguaty se limita a 12 camas para internar a adultos y 12 camas para niños menores, que actualmente están cubiertas en un 100 por ciento. Inclusive, muchos enfermos son enviados a sus domicilios para seguir sus tratamientos por la incapacidad de absorber a todos los necesitados de internación.
Guzmán refirió que para este fin de mes se estaba programando una serie de cirugías laparoscópicas para inaugurar el quirófano número dos del hospital, pero ante la epidemia se debió suspender para brindar atención a los pacientes con cuadros respiratorios.
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Similar situación enfrenta el Hospital Regional de Saltos del Guairá, donde concurren pacientes de al menos 8 distritos en forma directa, y reciben pacientes remitidos por las diferentes unidades de Salud Familiar (UDF) de todo el departamento, e incluso de servicios privados de todo el Canindeyú.
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También debe encargarse de un gran porcentaje de los asegurados de IPS, teniendo en cuenta que la previsional no cuenta con un hospital capaz de absorber todas las necesidades de la región.
