Obispo de Caacupé pidió rezar por el alma de María Ramona

Monseñor Ricardo Valenzuela inició su homilía recordando a la mujer desaparecida en Altos, cuyos restos fueron encontrados en el cerro Cristo Rey de Caacupé. El obispo pidió rezar por su alma y por las víctimas del Ycua Bolaños, un evento que también dejó enlutado a todo el Paraguay.

“En este momento de dolor y angustia nos unimos para brindar nuestro apoyo y solidaridad a quienes están atravesando esta difícil situación. Oremos por todos ellos. Vivimos en una sociedad que vive de seguros, pero reflexionemos: ¿para qué sirve eso? ¿Acaso eso nos salva de la muerte?”, exhortó.

Lea más: Un pastor con olor con olor a oveja

El obispo mencionó que, a consecuencia de esto, hay varios crímenes entre parejas que pelean por el dinero, por esto debemos entender que el Reino de los Cielos es “el único seguro de vida. “El que cree en Mí, aunque muera, vivirá, nos dice Jesús”, expresó.

Asimismo, el prelado agregó que todos debemos entender que si continuamos una vida superficial solo nos encontraremos con tropiezos y más tropiezos. Señaló que muchas veces los cristianos no se dan cuenta de que en su campo hay oro y lo venden. “Son aquellos tantos hombres y mujeres que no le dan el verdadero valor a lo que tienen”, agregó.

Han vendido la fe

Monseñor Valenzuela también dijo que hemos malvendido la fe, porque hay quienes la han cambiado por una ideología. “Hay otro que ha cambiado por dinero y placer. Entonces debemos preguntarnos si nosotros hoy estamos dispuestos a abandonarlo todo con tal de no perder a Dios y nuestra fe. No somos capaces de dar una media hora de tiempo a Dios para participar de la eucaristía y refrescar nuestra fe”, reflexionó.

Resaltó además que todos tenemos que comprender que buscar a Dios, no produce tristeza ni amargura, sino todo lo contrario, genera alegría y paz, porque la persona va descubriendo dónde está la verdadera felicidad.

Lea más: Multitudinario y emotivo "Vía Crucis viviente" en Caacupé

Monseñor Valenzuela instó a los feligreses a curarse de tanto correr detrás de las cosas superficiales. “Quien cree y sabe vivir la palabra de Dios, ese encuentra el tesoro”, puntualizó.

Al término de la santa misa, Miguela Britos y Lucas Orlando cantaron para recordar el Día de la Amistad, mientras que los alumnos de la escuela Presbítero Daniel Escurra compartieron una emotiva representación teatral sobre Jesús.

En la jornada dominical se pudo observar una concurrida presencia de visitantes de Pilar, Carapeguá, Salto del Guairá, Santa Fe, Capiatá y Nueva Italia. Las canciones religiosas estuvieron a cargo del coro San Juan Pablo II.