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El 31 de julio del 2008 el ganadero había sido secuestrado por el Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP), y luego de 40 interminables días, fue liberado el 12 de setiembre de 2008. Pero el terror no iba a terminar para él.
Lindstron fue solo a tempranas horas de aquel viernes 31 de mayo a la estancia Paso Itá, en la localidad de Tacuatí Poty, departamento de San Pedro, propiedad de la ganadera Marys Llorens.
Se retiró a las 8:50. A bordo de su camioneta tomó un camino vecinal con destino a la ciudad, pero antes de darse cuenta de lo que sucedía, él y su camioneta fueron rociados a balazos con proyectiles de grueso calibre.
Herido de muerte siguió conduciendo pero perdió el control de su rodado y chocó contra un árbol. Pese a las heridas, abrió la puerta e intentó huir a pie...Esos fueron sus últimos pasos.
Los asesinos fueron miembros de la misma banda que lo secuestró, se acercaron a él y le dieron el tiro de gracia. Se aseguraron de matarlo con un tiro en la cabeza y le siguieron otros varios en el rostro, con un fusil calibre 5,56.
Todo esto sucedió en menos de 10 minutos. A las 9:00, policías que resguardan la estancia desde los últimos ataques perpetrados, notaron la camioneta accidentada de Lindstron.
Se reforzó el persona y se hizo una incursión inmediata, incluso aérea con helicópteros, para rastrear a los atacantes y prevenir otros atentados.