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De acuerdo a la denuncia del fiscal, fue suspendida 11 veces una audiencia preliminar a tres acusados de narcotráfico y lavado de dinero.
Mediante nota que tuvo entrada el pasado martes en el Juzgado de Garantías de San Pedro del Paraná, a cargo del juez Nelson Báez, el fiscal Díaz solicita la aplicación del poder de disciplina previsto en el Código Procesal Penal (CPP) al abogado, y lo acusa de “abuso” de los recursos para el ejercicio de la defensa.
El caso guarda relación con un proceso por narcotráfico y lavado de dinero contra Ismael Paredes Flor, su esposa Máxima Sanabria de Paredes y los hijos de ambos, Ignacio e Hilda Paredes.
Los cuatro están imputados por presunto lavado de dinero proveniente del narcotráfico, pero en el caso de la esposa se invoca la figura de “asociación criminal”.
Ismael Paredes Flor, conocido por el alias “Patrón”, es considerado un importante proveedor de drogas a los mercados de Argentina, Chile y Uruguay.
Actualmente purga una condena de siete años de cárcel que le impuso un Tribunal de Sentencia integrado por los jueces Fabián Iglesias, Nelio Prieto y Diana Arana.
La fiscal que investigó la causa, Raquel Bordón, había solicitado 15 años de prisión.
El 5 de diciembre de 2017 la fiscal Bordón, asignada en forma interina a la causa de lavado de dinero sobre la familia Paredes Sanabria, había presentado su acusación contra los mismos.
Desde abril de 2018 se viene programando la audiencia preliminar, pero hasta la fecha no se pudo realizarla debido a maniobras dilatorias del abogado de la defensa.
En ocho oportunidades, el abogado César Villanueva alegó superposición de audiencias, y en dos de esas ocasiones habló de supuestas descompensaciones sufridas por Máxima Sanabria, con certificados médicos de dudosa procedencia, según una fuente del Ministerio Público.
Por su parte, Villanueva señaló que todavía no fue notificado del pedido de sanción en su contra, pero de todas maneras le restó importancia.
"Lo que el fiscal no dice es que cuatro de las suspensiones fueron por pedido de la misma Fiscalía", dijo.
Sobre sus pedidos de suspensión, y sobre si su número no implicaría una actuación de mala fe, Villanueva refirió que no porque "todas las oportunidades están debidamente justificadas".
Respecto de las consecuencias de la aplicación de una medida disciplinaria, señaló que una sanción de ese tipo supone un apercibimiento que va consignado al legajo del profesional.