Más allá de evocar un discurso moralista, considero pertinente agregar algunos condimentos al debate sobre el cuidado de nuestros espacios turísticos, principalmente los de Itapúa, que se encuentran entre los más elegidos por el turismo interno durante la temporada alta.
Según datos de la Asociación de Hoteleros de Itapúa (Ashoit), así como creció la oferta de camas en la zona —que pasó de 5.000 a 6.000 disponibles—, también aumentó la intención de visitar la región en temporada alta. Estiman que las reservas para Navidad y Año Nuevo ya superan el 80% de la capacidad hotelera. Entre los visitantes, el turista paraguayo proveniente de otros puntos del país sigue siendo el público más importante, representando alrededor del 60%, mientras que los extranjeros rondan el 40%.
El extranjero ve cada vez con mejores ojos la posibilidad de hacer turismo en esta región. Los hoteleros refieren un crecimiento sostenido de visitas de turistas provenientes de Brasil, algunos países de Europa y de Estados Unidos. En contrapartida, prestadores de servicios y responsables de espacios turísticos señalan que en muchos casos el turista paraguayo presenta un comportamiento menos responsable.
El connacional es el que muestra actitudes prepotentes cuando está en falta. Penosamente, son quienes generan mayor cantidad de residuos y los arrojan a la vía pública de manera irresponsable. También se muestran menos interesados en cumplir normas básicas, como respetar las boyas o la prohibición de ingresar con envases de vidrio a las playas. A ello se suma la conducción en estado de ebriedad, que deriva en accidentes perfectamente evitables.
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Más allá de cargar la responsabilidad sobre un grupo determinado, cabe preguntarse si estas actitudes se repiten en los turistas extranjeros o, en su defecto, si el paraguayo se comporta de la misma manera cuando sale al exterior. Pareciera que, de forma casi inconsciente, relegamos nuestros propios sitios turísticos a un valor menor que aquellos ubicados fuera del país.
Al término de cada temporada, es el ciudadano local quien redobla esfuerzos para mantener una ciudad que busca crecer y consolidarse como un destino ideal para el turismo responsable. Ojalá que, en un año con augurios de crecimiento del público extranjero en la región, estas malas prácticas puedan ser superadas en favor del trabajo y el compromiso de toda la ciudadanía itapuense, que reafirma su interés por mostrar al mundo las maravillas que tiene el Paraguay.
Sergio.gonzalez@abc.com.py