El enorme animal perdió el rumbo mientras migraban y quedó atrapado en un puerto de Estados Unidos. El hecho fue grabado y se volvió viral.
BUENOS AIRES (EFE). Una ballena sorprendió ayer a los vecinos de Buenos Aires al aparecer en las aguas de uno de los diques del lujoso distrito de Puerto Madero.
SÍDNEY. Un grupo de científicos avistaron un raro ejemplar de ballena jorobada albina en las costas de Nueva Zelanda, que por sus características podría tratarse del mítico ejemplar “Mingaloo”, informan fuentes oficiales.
Las adaptaciones de las ballenas son extraordinarias. Son enormes, como la ballena azul, de 26 metros de longitud y un peso de entre 80 y 134 toneladas. Hay una buena razón para este tamaño, puesto que la temperatura del agua es mucho más baja que la de su sangre y, al igual que otros mamíferos acuáticos, corren el riesgo de perder calor corporal y morir de frío.