Causa del metrobús debe pasar a la unidad delitos económicos, exige denunciante

El Ing. Hermann Pankow exigió al nuevo fiscal general del Estado, Emiliano Rolón, que traslade el caso del metrobús a la unidad de delitos económicos. Esto atendiendo a que la causa continúa en una unidad penal ordinaria, donde estuvo cajoneada por varios fiscales.

“El caso debe pasar a la unidad de delitos económicos porque es un golpe económico al Estado. Es un complejo golpe económico. Necesariamente debe ir a delitos económicos. Sería un indicador que Rolón comienza a cambiar las cosas”, expresó.

Por otro lado, insistió en que “cualquier desvío de poca plata mandan a delitos económicos”, como fue en su momento, por ejemplo, el caso del “superviaducto”, que fue investigado tras una denuncia de Pankow, por un recorte de US$ 3 millones del proyecto, que se sigue inundado con cada lluvia.

Lea más: Se ganó 5 años más para investigar el caso del metrobús, según la fiscala

Pankow señaló que desde el principio se dio cuenta que la unidad penal ordinaria no iban a investigar el caso de la fracasada obra. “Les costó mucho blanquear el superviaducto y, para evitar problemas, mi siguiente denuncia fue la del metrobús, que ya no enviaron a delitos económicos.

La fiscalía es una asociación criminal, señaló

El ingeniero también señaló que la fiscalía es una asociación criminal. “Para blanquear usan a las fiscalías perdidas, así pueden alegar falta de recursos, tiempo. En este caso hasta cambiaron la carátula para esconder luego”, expresó.

Al mismo tiempo, Pankow señaló que conoce muy bien “las dos caras de esa asociación criminal que llaman fiscalía” y “como persiguen a inocentes y como blanquean a corruptos”.

Lea más: Metrobus: fiscales que cajonearon el caso pueden ser destituidos, señalan

En este sentido, resaltó que todos los “fiscales amigos” son premiados, como el caso de la agente Natalia Silva, designada inicialmente para “congelar” el metrobús, según dijo, fue nominada a la unidad especializada de delitos económicos.

Asimismo, el Ing. lamentó que “nadie dice nada” y que por eso está refugiado en otro país, porque alegó que hasta recibió amenazas de muerte “por enfrentar a esa mafia Cartista que maneja hasta la fiscalía”.

“El problema ahora ya no es el robo del metrobús, sino el uso de la fiscalía para perseguir inocentes o blanquear a delincuentes”, expresó.