Deuda pública: aconsejan cumplir plan de convergencia para retornar a la sostenibilidad

“Análisis de Sostenibilidad de la Deuda Pública de la Administración Central y su impacto en el Presupuesto Público” fue uno de los temas expuestos ayer en el evento denominado “gLOCAL 2023 Semana de la Evaluación”, que se llevó a cabo en el World Trade Center.

La actividad fue organizada por el Ministerio de Hacienda, a través de la Dirección General de Presupuesto (DGP), con el apoyo del Programa de la Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), en la que fueron presentadas evaluaciones sobre la deuda, el subsidio al pasaje, la gestión del Ministerio de Salud, diseño del Ministerio de la Niñez y la Adolescencia, entre otros.

El estudio sobre la deuda fue expuesto por José Acuña y Andrés Britez, analistas senior de evaluación del Ministerio de Hacienda, quienes explicaron la metodología utilizada y las variables que inciden en la sostenibilidad de la deuda, tales como tasa de crecimiento económico, tasa de interés, saldo primario corriente (ingresos-gastos), inflación y tipo de cambio.

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Los analistas explicaron que en 2003 la deuda de la administración central representaba 31,1% del PIB, pero tras la cesación selectiva de pagos que se registró, el nivel se redujo en los siguientes ocho años para situarse en 2011 en 6,9% del PIB.

El ratio, sin embargo, desde 2012 empezó de nuevo a subir, hasta que en 2019 se situó en 19,7% del PIB, pero al año siguiente, en pandemia, dio un salto alcanzando 29,7%; luego en 2021 subió al 30,1% y en 2022 al 32,6%, mientras que para el presente año estiman que cerraría en 33,1% del PIB, según los datos expuestos.

En este contexto también se menciona el incremento que registran los intereses en los últimos años, debido al aumento de la tasa en el mercado internacional.

Intereses y plan de convergencia

Los analistas concluyen que los compromisos derivados de la adquisición de deuda (intereses) muestra un incremento promedio superior al crecimiento de los ingresos tributarios, hecho que obliga a redireccionar recursos para su cumplimiento.

Además, el modelo demuestra que con la convergencia fiscal (déficit de 1,5% del PIB) esperada para el 2024, el nivel de endeudamiento retornará a un sendero de sostenibilidad en el mediano plazo y que la incorporación de los escenarios con shocks económicos, muestran que los niveles de deuda se encuentran en un nivel administrable.

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En la exposición, los expertos recomendaron cumplir con la convergencia hacia la Ley de Responsabilidad Fiscal (LRF); incorporar herramientas financieras (cobertura, forward) que permitan la administración de riesgos afectados por el tipo de cambio y variación de tasas de interés.

También, incentivar el uso del mercado interno como alternativa de financiamiento, con el objetivo de reducir la volatilidad generada por la variación del tipo de cambio y la tasa de interés; incentivar la formalización de la economía e incorporar alternativas para incrementar los ingresos tributarios; así como considerar nuevas estrategias de financiamiento para las inversiones públicas, como la asociación público y privada (APP).