Petropar adjudicó para obra fantasma en Troche a firma con antecedentes

Petropar desembolsó más de US$ 2,6 millones (G. 12.000 millones) por una obra fantasma en su planta de Troche a la empresa “MGA Constructora” de Michael Azuaga, una firma que cuenta con varios antecedentes de obras inconclusas con el Estado. La petrolera estatal le concedió un anticipo ilegal del 50%, pero jamás realizó el trabajo. En el ente dilapidan y ahora piden un ajuste en el gasoíl.

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El principal problema que arrastra Petropar es su alto grado de corrupción y la impunidad con la que se manejan. Reiteremos que la ciudadanía solventa los excesos de sus administradores de turno con los aumentos de precio de los combustibles que vende.

El nuevo escándalo se relaciona con una licitación que la administración de Sergio Escobar autorizó con asombrosa rapidez y que concluyó antes de las elecciones generales de abril último, pero que jamás se concretó. Petropar desembolsó en forma ilegal el 50% (G. 12.000 millones o US$ 2,6 millones) del monto total adjudicado (G. 24.000 millones o US$ 5.400.000) a la firma “MGA Constructora”, de Michael Humberto Azuaga Ramírez, para la provisión, instalación y puesta en marcha de equipos para electrificación de molinos para la alcoholera de Troche de Petropar.

La alcoholera se constituyó en los últimos tiempos en el pretexto favorito para el derroche del dinero público, en obras inservibles, que no sirvieron para mejorar la productividad de la fábrica, porque cada vez está peor.

Antecedentes

La empresa beneficiada por la administración del extitular de Petropar, Sergio Escobar, “MGA Constructora”, ya fue favorecida en otros procedimientos licitatorios, como los convocados por el Hospital Nacional de Itauguá, entre 2011 y 2012, que también le desembolsó millonarios anticipos por obras iniciadas, pero que no fueron concluidas, según una auditoría interna encarada por el Ministerio de Salud Pública y que fue publicada por nuestro diario en abril de este año, en el mismo lapso en que Petropar le adjudicaba su obra fantasma, en su alcoholera.

La auditoría de referencia reveló que la misma constructora contratada por Petropar recibió un anticipo de G. 294 millones por una rampa que ni siquiera comenzó, y que fue adjudicada por un total de G. 588 millones. Además le otorgaron otra obra por G. 359 millones, y que también cobró un anticipo por G. 201 millones, pero sin concluir.

Igualmente, construyó empedrados en Quiindy (Paraguarí), y fue denunciado por los vecinos por la mala calidad de las obras.

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