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Partieron desde la Municipalidad de Cambyretã. Primeramente se dirigieron al domicilio del diputado colorado Mario Cáceres. Luego fueron hasta la vivienda de Mercedes Lugo de Maidana, hermana de Fernando Lugo. La tercera parada fue la casa del diputado de la ANR Walter Harms, a quien le gritaron “bandido” y lo responsabilizaron de la muerte de Rodrigo Quintana.
Durante la protesta, Harms salió frente a su domicilio, lo que provocó el enojo de los manifestantes. Aun así, el parlamentario les dijo a los indignados que hará uso de su voto para apoyar la enmienda de la Constitución.
Posteriormente, el legislador colorado ingresó nuevamente a su casa, ínterin en que le arrojaron botellas de plástico. Hicieron uso de la palabra la concejala de María Auxiliadora María Ríos, y expresó que Harms no va a salir con su objetivo.
El concejal departamental colorado Silvio Piris fue uno de los coordinadores de la caravana de repudio. Un fuerte contingente policial resguardaba la propiedad de Harms. Como última parada estaba fijada la casa del diputado liberal Édgar Ortiz, ubicada en el asentamiento de localizados en Arroyo Porã, distrito de Cambyretá, a 7 kilómetros del centro de Encarnación. Ahí arrojaron rollos de papel higiénico en señal de repudio contra él.
El intendente de Cambyretã, Javier Pereira (PLRA), dijo: “Con todo respeto, venimos a pedir cordura. Nuestro país está a punto de rifarse. Ninguno de los que tomen decisiones en contra del pueblo será bienvenido en Cambyretá”.
Agregó que “no estamos ajenos a la reelección, pero no como pretenden hacer. Si continúan con su intención, bueno, entonces esto recién comienza”.