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Así se desprende de las declaraciones de Ricardo Vaesken, quien señaló que los mismos diputados se encargan del “control” de sus funcionarios.
En el caso de la “niñera” Gabriela Quintana se evidenció que la supuesta asistencia de la funcionaria en la Cámara era firmada por el entonces titular de Diputados, el actual senador Víctor Bogado.
Otro es el caso de los “caseros” del diputado colorado José María Ibáñez, donde el parlamentario, junto a su encargada de despacho María Liz Gutierrez, son los responsables de “avalar” la “asistencia” de los mismos. Sin embargo, la Dirección de Recursos Humanos no se responsabiliza de ningún funcionario u otra irregularidad existente en la citada dependencia. En la Cámara de Diputados se evidencia que son pocos los funcionarios que utilizan el sistema biométrico o marcación digital de asistencia. Pero en ambos casos, el responsable de la Dirección de Recursos Humanos, Ricardo Vaesken, es investigado por el Ministerio Público, siendo el encargado directo de los funcionarios de la dependencia legislativa.