Qué tener en cuenta para alimentar a los gatos

La alimentación de un gato no es la misma cuando se trata de un cachorro y otro adulto. Los requerimientos son diferentes, por lo tanto, la cantidad adecuada se regirá de acuerdo a la etapa del animal, la raza, el estado físico y nivel de actividad.

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“Los requerimientos de los gatos cachorros son mayores en cuanto a alimentación, ya que se encuentran en etapa de crecimiento. En las primeras semanas de vida, hasta las siete a nueve semanas, la alimentación está basada en leche materna”, señaló en una entrevista anterior concedida a ABC Color, el Dr. Gerardo Benítez García, veterinario.

Acotó que ya “desde las nueve semanas la alimentación debe ser con balanceados para cachorros, que pueden ser humedecidos con agua para ablandarlos. A partir de las 12-14 semanas, cuando la dentadura está desarrollada, ya son capaces de comer el balanceado o pellet seco. Recuerde que los comercios venden productos balanceados etiquetados para cachorros y adultos”.

“Un gato que no se alimenta en forma adecuada no tiene los nutrientes apropiados para su edad, ocasiona trastornos para su salud, así como el exceso puede aumentar el riesgo de sobrepeso y padecer enfermedades como la diabetes mellitus no insulinodependiente, que está íntimamente relacionada con la presentación de una enfermedad muy grave en el hígado, conocida como lipidosis hepática”, refirió.

El doctor Benítez sostuvo que “en gatos adultos el peso ideal es de 5 kg en el macho y 4 kg en la hembra, pero puede variar en cuanto a raza y tamaño del animal”.

“Los requerimientos nutricionales de un cachorro y un adulto varían, porque son mayores en los primeros meses, ya que están en etapa de crecimiento, y en los gatos adultos, dependiendo también de la actividad física que realice, los requerimientos nutricionales serán mayores”, alegó el profesional.

“Además es importante el estado de salud de los gatitos con relación a la ingesta de alimentos, por lo tanto, varía entre un gatito enfermo y otro que es sano”, señaló.

Refirió que “el sobrepeso y la obesidad también se pueden presentar en los felinos, y para evitar la aparición de este problema se deberá actuar desde la etapa de cachorro, que es un período crucial”.

Incluso, recomiendó que “la mejor prevención es suministrarle al gato exactamente la cantidad de comida que necesita en función de su edad, raza, estado físico y nivel de actividad. Para establecer el tamaño de las raciones podemos consultar con el profesional veterinario”.

Es imprescindible, según el veterinario, no solo para evitar la obesidad, que el gato realice ejercicio físico, además conviene controlar regularmente el peso del animal y pedirle al veterinario un diagnóstico si sospechamos que puede estar excedido de peso. En las primeras fases de la enfermedad es difícil apreciar el aumento de tamaño”, puntualizó.

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