Ineram, repleto de basura acumulada ante inacción de la Municipalidad

Afortunadamente, quedó atrás la dura época en la que cientos de familiares de pacientes aguardaban en el predio del Instituto Nacional de Enfermedades Respiratorias y del Ambiente (Ineram) por buenas o malas noticias, pasando horas de sufrimiento.

Si bien esto pudimos superarlo como país, el hábito que no abandonamos es el de arrojar basura a la superficie, esparciéndola en cualquier lugar, menos en el basurero.

Y es precisamente esta situación de antihigiene y desorden la que seguimos manteniendo como parte de nuestra cultura y la que ocasiona que hoy el predio del Ineram sea prácticamente un vertedero de insalubridad.

Simplemente no la recogen

Vecinos del lugar refieren que la basura acumulada lleva días en el lugar y no se recoge.

Si bien la pandemia menguó, aún hay algunos pocos pacientes apostados en carpas, aguardando a sus familiares que se encuentran internados por distintas afecciones respiratorias independientes del COVID-19.

Por supuesto, también siguen existiendo pacientes internados en Unidades de Terapia Intensiva por coronavirus, pero lo positivo es que al no estar ya colapsado el nosocomio, las pocas personas que ingresan son bien atendidas y sus medicamentos cubiertos.

Los familiares comentaron que ellos mismos se encargan de limpiar el espacio que ocupan, pero lo negativo es que las bolsas de basura no se recogen. Señalaron que la basura acumulada está en el mismo lugar al menos desde el martes, pues cuando ellos llegaron ya estaba allí.

Comuna es la responsable

La Municipalidad de Asunción es la que debería recoger estos desechos en forma regular, pero no lo hace, según denunciaron los propios ciudadanos.

Muchos entrevistados coincidieron en que es inconcebible que esta sea la realidad en un nosocomio, donde pacientes y sus familiares tienen que aguantar los olores nauseabundos.

La basura acumulada no se reduce solo a las bolsas, sino a los desechos que están esparcidos por la amplia superficie del hospital, dejando el lugar en condiciones insalubres, hecho que es irónico y vergonzoso al tratarse de un centro asistencial de salud pública.