A raíz de las experiencias del pasado que costaron muy caro a los paraguayos, debemos evitar errores como los que se cometieron en su momento por permitir injerencia política, como la liberación bancaria, otorgándose licencias a bancos de “amigos”, lo que derivó en la crisis financiera de los 90, reflexionó Alberto Acosta Garbarino, directivo de la Asociación de Bancos del Paraguay (Asoban) durante el conversatorio por los 70 años del BCP.
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Acosta dijo que igualmente en este tiempo la injerencia política sigue siendo una amenaza, sobre todo viendo el contexto regional donde predominan algunas medidas populistas como la fijación de precios, los subsidios y otro tipo de concesiones. Además se suma que este año hay elecciones en nuestro país y con ello los pedidos de aumentos salariales que ya saltan a la vista. “Mi temor es que la política desbarranque la economía y las instituciones que están bien” advirtió Acosta.
Durante el conversario que se realizó en el instituto del BCP también participaron ex presidentes de la banca matriz como Jorge Corvalán y Germán Rojas, además del actual presidente José Cantero.
Estabilidad ayudó a contener la pobreza
A su turno el economista Jorge Corvalán quien dirigió la entidad monetaria entre el 2008-2013 instó a mantener los fundamentos de la estabilidad macroeconómica y las cosas que se hicieron bien para una inflación baja y estable, responsabilidad fiscal y un sistema sólido que dieron buenos resultados al país, como la reducción del nivel de pobreza en 50% en las últimas dos décadas. De 51,4% en el 2003, el índice de pobreza llegó a 26,9% en el 2021, en medio de la pandemia.
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“La Banca Central es la responsable de mantener la inflación baja y estable, en ese sentido es prioritario mantener lo que funciona” expresó Corvalán. Durante su periodo se implementó el esquema metas de inflación (2011) que aportó mayor transparencia en las decisiones de política monetaria, consecuentemente una inflación menos volátil (variable) entre un periodo y otro.
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Alta inflación persistirá
En el contexto actual de alta incertidumbre los panelistas coincidieron que la inflación seguirá siendo un tema central de preocupación de todos los países, quienes están acompañando con diferentes medidas pero igualmente no suficientes para contener la escalada de precios.
Por su parte el BCP desde agosto del año pasado viene elevando su tasa de política monetaria desde 0,75% a 6,25% del último ajuste de esta semana, como una medida para contener la inflación que en febrero alcanzó un pico de 9,3% interanual. El nivel más elevado de inflación en nuestro país se dio en los tiempos de la crisis financiera de los 90 cuando el Índice de Precios del Consumidor (IPC) llegó a niveles cercano al 40% de variación interanual.
Por otra parte, Corvalán instó a seguir implementando reformas para que el Estado sea más eficiente y eficaz.
A su vez Germán Rojas ex titular del BCP entre el 2007 y 2008, destacó la institucionalidad ganada por la banca matriz, con inversión en su capital humano, lo que transmite confianza a los agentes económicos.
A futuro instó a seguir la senda de transparencia en cuanto a las decisiones de política monetaria, y avanzar en una mayor conectividad de las instituciones para mejorar el servicio publico y avanzar en cyber seguridad.
Importamos inflación
Considerando que la inflación se concentró principalmente en dos rubros de la canasta básica que importamos (como combustibles y algunos alimentos) se puede mencionar que tienen una fuerte incidencia en el Índice de Precios del Consumidor (IPC), por factores que vienen de afuera, mencionó el titular del BCP José Cantero al término del conversatorio por los 70 años de la banca matriz.
A enero último, la inflación interanual en el rubro de combustibles fue del 34,3% y alimentos del 14%, de acuerdo con las cifras oficiales.
“Este escenario de alza de precios que estamos viendo hace mucho tiempo no lo veíamos. El ancla se desconfiguró”, expresó Cantero
Detalló que al importar estos precios se genera un efecto en la economía local que difícilmente se puede revertir porque son choques de afuera.
En lo que respecta a la función del BCP, expresó que se ya tuvo la posibilidad de repensar la política monetaria a través de los ajustes de la tasa de interés, a fin de lograr esa convergencia a la meta del 4+-2%
“Sin embargo, en este nuevo territorio se imponen desafíos muy importantes para el conjunto de las políticas económicas que garanticen la estabilidad”, afirmó.
El titular del Banco Central dijo que considerando el contexto externo, es probable que la presión inflacionaria persista en gran parte de este primer semestre, pero que esperan que la inflación para final de año se acomode dentro del rango meta. Añadió que las expectativas de los agentes económicos acompañan esta tendencia. En cuanto al impacto al consumidor y la pérdida del poder adquisitivo que se está viendo explicó que desde la entidad monetaria seguirán trabajando por contener la inflación ya que esto genera previsibilidad y sobre todo para que el sector mas vulnerable no sea afectado.