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Francisco, padre de Marcelo Pecci, el fiscal asesinado cobardemente en mayo del año pasado, pasará este fin de semana el segundo fin de año sin su primogénito. El dolor que sufre es inmenso y, a pesar del paso del tiempo, este no se agota.
En comunicación con ABC, Francisco quiso expresar un mensaje para la ciudadanía, frente la indiferencia que observa ante el avance del crimen organizado en la sociedad paraguaya, donde los narcos “se enseñorean” con el dinero que obtienen producto del crimen, aseguró.
“Es muy triste. Si bien la resignación se produce a través del largo tiempo, es inaudito cómo el mal se impone al bien. Cómo algunos o la mayoría de los que tienen mucha plata la tienen sucia y malhabida”, señaló en un mensaje enviado a ABC Cardinal.
“Mi hijo pudo haber sido un excelente profesional de la abogacía, uno más entre tantos buenos profesionales; sin embargo, estuvo en el Ministerio Público y llegó a ser el fiscal más eficiente, más pujante y más valiente. El destino lo llevó a ser asesinado cobardemente y truncar una vida honesta a los 45 años”, agregó.
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Marcelo Pecci: “Mi hijo se inmoló por una causa justa”
Francisco recordó que formó a su primogénito desde que nació. “Y en estos días (decimos) ‘felicidades’, y está bien como cumplimiento formal, son días de celebración, pero quién no tiene un ser querido que haya fallecido de alguna forma. Cuando es uno grande, por enfermedades, uno acepta el destino, pero cómo mataron a mi hijo es inaudito”, dijo.
“Él no creía, era tan bueno, tan decente y tan inmolado a la causa justa, esa causa justa que va contra las drogas, de la cual se enriquecen muchísimos, no todos, pero muchísimos malos políticos. Algunas personas se enseñorean en grandes ganancias y grandes lujos”, lamentó.
“Todos dicen ‘el legado de tu hijo’, cierto; sin embargo, las lágrimas nunca cesarán. Deseo también aprovechar esta ocasión y agradecer a los que me escuchan en el sentido en que se han portado muy bien con todos nosotros”, agradeció don Francisco.
El padre de Marcelo Pecci cerró su mensaje enviando un abrazo a toda la ciudadanía, pero agregando: “Yo también diré de cumplido, a mí me dirán ‘feliz año nuevo’ todos los que quieran. Para mí, a mi edad mayor, ya no hay ‘feliz año’ nunca. Mi hijo ya está muerto”, sentenció.
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